Artistas e inteligencia artificial. Una lucha, una batalla y una polémica que crece todos los días. Hasta el momento, sabemos que la IA puede retratar y crear cualquier tipo de texto e imagen a partir de ciertas indicaciones. Si le digo: “Creá una imagen del sur argentino con influencia de Van Gogh” me dará, en pocos minutos, una foto de las montañas patagónicas postimpresionistas.
Pero muchas de las compañías de tecnología son acusadas de “robar” el trabajo de los artistas para entrenar sus softwares de IA sin ningún tipo de remuneración ni reconocimiento. Una problemática que ya ha escalado a otro tipo de disciplinas, como la literaria.
Para apaciguar un poco las aguas, OpenAI introdujo una nueva actualización dentro de su herramienta creadora de imágenes, DALL-E 3. Esta consiste en, primero, que el bot rechace cualquier tipo de pedido que se haga en pos de la generación de contenido en base al trabajo de otros artistas vivos y, segundo, que los creadores y artistas puedan elegir que sus trabajos no formen parte del contenido que alimenta los sistemas de IA.
"DALL-E 3 está diseñado para rechazar solicitudes que pidan una imagen al estilo de un artista vivo”, explicó la empresa en un comunicado oficial. “Los creadores ahora también pueden optar por excluir sus imágenes del entrenamiento de nuestros futuros modelos de generación de imágenes”, aseguró el comunicado en referencia a otra de las iniciativas que están tomando.
Pero, ¿cuánto puede beneficiar a los artistas esta medida? De acuerdo con The Atlantic, OpenAI pretende ofrecer a los artistas una forma de evitar que sus obras se incluyan entre las millones de fotos, pinturas y otras imágenes que programas de inteligencia artificial como DALL-E 3 utilizan para generar sus propias imágenes.
Es un mecanismo de “Opt Out” (en español elegir que no), es decir que los artistas que deseen que su trabajo no se incluya en la programación de los sistemas deben seguir una serie de instrucciones o, en caso de que hayan visto que sus obras ya se han utilizado, pueden completar un formulario para que esas imágenes se remueven de los sistemas.
"No he dado mi consentimiento para que mi nombre o mi trabajo se utilicen de esta manera", expresó Kelly McKernan según VOA News , una artista visual ha demandado a Stability AI y Mid Journey por supuesta infracción de los derechos de autor de los artistas con sus modelos de generación de imágenes.
Además, la credibilidad de esta medida se pone en duda debido a que la mayor parte de los sistemas de IA ya se nutrieron de muchas obras de los artistas. Entonces, es posible que esa información siga alimentando las sucesivas versiones de estos sistemas. La medida, bien intencionada, tal vez llegó demasiado tarde.