Se llevó a cabo en Gran Bretaña un nuevo análisis sobre la semana laboral de cuatro días. El experimento consistió en 15 meses de recolección de datos y se hizo con 450 empleados públicos del distrito de South Cambridgeshire, que eran trabajadores de escritorio y recolectores de basura.
¿Cuáles fueron los resultados?
Quienes analizaron los resultados fueron académicos de las universidades de Cambridge y Salford. A grandes rasgos, el resultado fue que menos recolectores renunciaron, además de que el proceso de toma de decisiones y respuesta a llamados fue más veloz, según informó The Guardian.
Específicamente, el desempeño fue:
- Mejor en 11 de 24 áreas.
- Con poco o ningún cambio en 11 de 24 áreas.
- Peor en 2 de 24 áreas.
Otros resultados tangibles fueron que la rotación de personal se redujo en un 39 % (debido al descenso de renuncias). Esto implicó un ahorro de £371,500 en un año, principalmente en costos de personal de agencias. Además, un 15 % más de las decisiones de planificación se completaron en tiempo y forma. También se redujo el tiempo necesario para procesar los cambios en las reclamaciones de beneficios de vivienda y beneficios de impuestos municipales.
Joe Ryle es el director de la Campaña de la Semana de 4 Días, y comentó que los resultados implican que esta alternativa es "una gran oportunidad para que los consejos y las organizaciones del sector público". Sin embargo, este experimento recibió fuertes críticas de parte del gobierno Conservador. La ministra Bridget Smith reclamó mientras se conducía el experimento que no era justo con los ciudadanos y residentes del distrito que pagan sus impuestos con normalidad.
El extremo opuesto: semana laboral de seis días
Por otro lado, Grecia implementó este mes el permiso de una semana laboral de seis días. Se trata de una nueva ley que es opcional, se aplica solo a empresas que operan 24/7 y excluye a las industrias turística y alimentaria.
Estos seis días sumarían una carga semanal de 48 horas semanales, en línea con el límite establecido por la directiva de la Unión Europea. Sus principales objetivos son impulsar el crecimiento económico, combatir el trabajo no declarado y la evasión fiscal. Respecto de las horas extra, la compensación es un 40 % adicional en el pago.
"El núcleo de esta legislación es favorable a los trabajadores. Está profundamente orientada al crecimiento y pone a Grecia en línea con el resto de Europa", comentó el primer ministro griego, Kyriakos Mitsotakis, antes de que el parlamento aprobara la ley.
Esta medida, sin embargo, fue objeto de fuertes críticas por parte de los sindicatos, que la calificaron como "una barbarie". Akis Sotiropoulos, miembro de la Confederación de Sindicatos de Funcionarios Griegos afirmó: "No tiene ningún sentido. Cuando casi todos los demás países civilizados promulgan la semana de cuatro días, Grecia decide ir en sentido contrario".