A largo plazo, los edulcorantes artificiales no ayudan a reducir la grasa corporal y hasta pueden aumentar el riesgo de diabetes tipo 2, enfermedad cardiovascular y muerte prematura, dijo ayer lunes 15 de mayo la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La nueva recomendación se basa en una revisión sistemática de la literatura científica, que sintetiza los resultados más concluyentes sobre este tema. Básicamente, se reunió toda la evidencia disponible y se desaconsejaron los siguientes endulzantes:
- Acesulfamo K
- Aspartamo
- Advantamo
- Ciclamatos
- Neotame
- Sacarina
- Sucralosa
- Stevia y derivados de stevia.
The Washington Post citó dos estudios que dan cuenta de los posibles perjuicios de estos productos alimenticios. Uno publicado en Cell mostró que causaban cambios tanto en la función como en la composición del microbioma intestinal, las comunidades de bacterias, virus y hongos que viven en los intestinos. Por otro lado, una gran investigación publicada en BMJ halló que aumentaban el riesgo de problemas cardiovasculares como accidentes cerebrovasculares y enfermedades coronarias.
La OMS los llama edulcorantes sin azúcar (NSS, por sus siglas en inglés) y no se les encontró ningún beneficio, precisa un artículo de la revista científica BMJ. Según Francesco Branca, director de Nutrición y Seguridad Alimentaria de la agencia, “los NSS no son factores dietéticos esenciales y no tienen valor nutricional. Las personas deberían reducir la dulzura de la dieta por completo, comenzando temprano en la vida, para mejorar su salud".
La recomendación aplica a todas las personas, excepto a aquellas con diabetes preexistente, dado que todavía pueden beneficiarse del uso de estos sustitutos del azúcar.
No obstante, como toda investigación, la revisión citada por la OMS también tuvo algunas limitaciones. La profesora Nita Forouhi, médica especializada en nutrición y epidemiología de la Universidad de Cambridge, señaló a The Guardian que la duración de la mayoría de los ensayos controlados aleatorios fue corta, la certeza de la evidencia fue algo baja (la mayoría de los ensayos no compararon explícitamente el reemplazo del consumo de azúcar con NSS) y los NSS se consideraron como una clase de compuestos colectivos sin distinguir entre tipos individuales.
Entonces, ¿qué alternativas recomiendan los especialistas?
La nueva recomendación no es un consejo para consumir más azúcar real, sino para reducir la dulzura general de la dieta diaria, insistió la OMS. “Las personas deben considerar otras formas de reducir el consumo de azúcares libres, como consumir alimentos con azúcares naturales, como frutas o alimentos y bebidas sin azúcar", recomendó Branca.
El doctor Ian Johnson, investigador de nutrición y miembro emérito del Instituto Quadram, Reino Unido, dijo a The Guardian que “una mejor alternativa al uso de edulcorantes artificiales es reducir el consumo de productos industriales que contengan azúcares libres, como las bebidas azucaradas. Usar frutas crudas o ligeramente procesadas como fuente de dulzura y quizás, a largo plazo, tratar de reducir el gusto general por la dulzura”, aconsejó.
En diálogo con la CNN, la dietista Lisa Drayer dio cinco consejos para reducir el consumo de endulzantes artificiales y azúcar:
- Entrenar las papilas gustativas: “si reduce gradualmente el azúcar, incluidos los edulcorantes artificiales, e incluye más proteínas y alimentos ricos en fibra en su dieta, eso puede ayudarlo a tener menos antojos de azúcar”, indicó.
- Tomar café y té sin o con menos azúcar: prestar atención sobre todo en cafeterías, sugirió Drayer, porque los cafés con leche y saborizados pueden tener tanta azúcar como una lata de gaseosa o más.
- Incluir la fruta de postre: manzanas horneadas con canela, frutos rojos o duraznos a la plancha pueden ser opciones a incluir, según la CNN.
- Prestar atención a los azúcares sigilosos: “los azúcares agregados a menudo están presentes en alimentos que quizás no consideres ‘dulces’, como salsas, panes, condimentos y aderezos para ensaladas”, explica el artículo.
- Verificar las etiquetas de información nutricional: todos los alimentos y bebidas deben indicar la cantidad y el tipo de azúcar en la etiqueta.