Ganas de playa. Ésas son las que se nos instalan a esta altura del año, cuándo el calor agobia y la cercanía de las Fiestas también. Por eso si estás planificando despedir el 2023 cerca del mar o tomarte unos días ni bien arranque 2024, te dejamos una sugerencia, para que no te pierdas la visita a uno de los balnearios más lindos, que está muy cerca de Las Grutas.
Se trata de Piedras Coloradas. Lo separan sólo 5 km de las playas céntricas, yendo en dirección al sur. Esa distancia, que parece corta, la vuelve especial. Primero, porque se puede atravesar a pie, y es toda una experiencia ir bordeando la orilla mientras el paisaje nos muestra esos detalles que lo hacen único.
Después, porque a diferencia de los balnearios más concurridos, sigue siendo un punto conectado con el relax, dónde el verano transcurre a otro ritmo, más tranquilo y en sintonía con el disfrute de la naturaleza.
Allí las playas son de una arena densa que forma un confortable colchón, para tenderse al sol o pisar sin estar pendientes de posibles cortes cuándo nos metemos en el mar. Es que la restinga, esa superficie rocosa que en otros sectores conforma el lecho marino, acá le deja lugar a esa agradable blandura. Hundir los pies sintiendo esa frescura es un placer.
Otra particularidad, que le da su nombre al lugar, son las enormes piedras, de un rojizo intenso, que aparecen como “salpicando” la costa. Su color se debe a la presencia de un mineral llamado feldespato. Cuándo el mar sube quedan parcialmente ocultas, y uno puede treparse a cualquiera de ellas para seguir pasando el día, tomando mate desde la cumbre de esa suerte de ‘isla’ personal. Mientras las olas impactan llenándonos de espuma.
Los altos médanos son otro de sus atractivos, porque se puede descender por ellos a bordo de una tabla de sandboard. La experiencia es divertidísima para compartir en familia o con amigos. Los chicos, además, van a amar la actividad. El alquiler de las tablas y trineos simples o dobles está $5000 la hora.
Se ofrecen en uno de los paradores que está atravesando un médano, en la parte más serena del sector. Allí alquilan también unas simpáticas sombrillitas de paja (que vienen con una mesa y dos reposeras) y confortables carpitas de caña, que ofrecen con el mismo equipamiento.
Este año pensaron en un combo. El que arrende una carpa o una sombrilla también accederá a dos recargas de agua caliente para el mate y dos pases para el baño, que es de acceso privado. Las sombrillitas, por día, salen $10.000 y las carpas $13.000.
Por otra parte, se puede comer algo rico, con la mirada puesta en el mar, azul y rumoroso. Una hamburguesa completa sale $7000, y hay una promo para los conos de papas. El tentador ‘conito’ de fritas se ofrece a $2500 si viene con una lata de gaseosa o a $3500 si la lata es de ‘birra’.
Si el atardecer invita a disfrutar de la puesta de sol con un trago, todos están $4000 (son de medio litro), y la cerveza se consigue desde $2000. Los licuados, $3000.
Uno de los imperdibles, además, es la pequeña biblioteca construida en adobe que está en el acceso al balneario. Ingresar y perderse entre sus paredes frescas ya es todo un plan. Pero, además, prestan libros para leer al borde del agua, hacen actividades recreativas y narran cuentos para los más chiquitos. Un excelente programa familiar.
Este contenido fue originalmente publicado en RÍO NEGRO y se republica como parte del programa «Periodismo Humano», una alianza por el periodismo de calidad entre RÍO NEGRO y RED/ACCIÓN.