¡Hola, amigos! Voy a aprovechar el paro del #8M para recomendarles una lista de autoras que me parecen geniales. Varias fueron editadas en el último año por primera vez en español. A algunas las conocí hace poco pero el flechazo fue inevitable. Otras vienen con libros nuevos. A otras... simplemente las amo.
Compartí esta newsletter o suscribite
1
Lucía Berlin. En 2017 Penguin Random House, bajo el sello de Alfaguara, publicó en Argentina a una autora de la que prácticamente nadie sabía nada. El libro era Manual para mujeres de limpieza, que para mí es la mejor recopilación de sus relatos, y viene con un prólogo de Lydia Davis.
- ¿Pero quién era Lucia? Supimos, en ese momento, que era una trashumante empedernida, de muchos maridos y varios hijos, que fue mujer de limpieza y maestra y profesora y enfermera y alcohólica. También, que había muerto en 2004. Y, lo que fue más importante, que era una escritora extraordinaria. De un silencio de décadas, pasó a ser superventas. Este mes salió su tercer libro en español: Bienvenida a casa. Es un libro breve, lleno de fotos, cartas y textos esta vez sí exclusivamente autobiográficos. Parece desprolijo, pensado a toda velocidad para poner contentos a la nueva horda de fanáticos de Lucía, pero así y todo es un libro hermoso.
2
Agota Kristof. Creo que cuando leí Claus y Lucas, el libro de la escritora húngara Agota Kristof, me volví temporalmente loca. Es una novela extensa (bah, son tres novelas en un solo libro: "El gran cuaderno", "La prueba" y "La tercera mentira") que, por sus diálogos, su tono tan directo y su crudeza, se lee a toda velocidad. Ambientada alrededor de la Segunda Guerra, las novelas son terroríficas, pero también magníficas, y tratan de dos hermanitos que no sabemos si son uno, en una tierra de nadie, en un pueblo semirural de fronteras, en medio de la guerra o al final. Libros del Asteroide lo imprimió acá, de modo que se consigue a un precio accesible
3
Camila Sosa Villada. ¿Quién no se enamoró de Las malas, el libro de Sosa Villada editado por Tusquets? Muchas ventas, mucho revuelo. Mi pasión por esta autora cordobesa (que es actriz, que es mordaz) trascendió límites. Quiero leer todo lo que haga, así que también la sigo en Twitter, en donde se llama "Camila Sola Villana", un nombre que la describe al dedillo. Busquen El viaje inútil y Tesis sobre la domesticación. Sí, de nada.
4
Vivian Gornick. Nos enamoramos con Vivian cuando la editorial mexicana Sexto Piso publicó y distribuyó en nuestro país Apegos feroces, una novela tremenda sobre la historia de Vivian y su mamá a lo largo de los años. Si no fue mi libro favorito, le pegó en el poste. Este mes vino uno nuevo: Mirarse de frente, también por Sexto piso. Ya lo estoy buscando.
5
Lorrie Moore. ¿Se acuerdan de la locura que hubo con esta autora el año pasado? ¿Les tocó alguna línea de esa fiebre virulenta? Bueno, hay buenas noticias: la tormenta de furia y fanatismo ya pasó, pero Eterna Cadencia fue por más. Después de ¿Quién se hará cargo del hospital de ranas? y de los ensayos (A ver qué se puede hacer, con traducción de Cecilia Pavón), vuelve otro clásico de ella: Anagramas, también traducido por Pavón (que publicó un libro nuevo el mes pasado). Denle de comer a su máquina adoradora.
6
Valeria Luiselli. ¿Ya hablé de esta autora? ¿No? ¿No hablé? Bueno, no importa. Busquen Desierto sonoro (Sigilo). Piérdanse ahí.
7
Carolina Sanín. Está revolucionando el tuiter colombiano y es amada u odiada con una intensidad electrizante. Escribiendo está del lado del bien absoluto: irreverente, culta, dueña de una voz bastante única. Blatt & Ríos, que ya publicó de ella Los niños, en estos días saca a la venta su libro de relatos Somos luces abismales. Ya lo leí y es muy bueno.
8
Post data. Paso a recomendar dos editoriales. Una, acorde con la efeméride, es Rosa Iceberg, bastante reciente (¿de 2017?), que solo publica chicas (“Editoriales que solo publiquen hombres ya existen”, dijeron las editoras Emilia Erbetta, Marina Yuszczuk y Tamara Tenenbaum). Editaron a Cecilia Fanti con su milagroso La chica del milagro, además de a I Acevedo con Late un corazón, y a autoras como Ana Navajas, Flor Monfort y próximamente, Majo Moirón.
La otra editorial para recomendar es Chai Editora. La verdad, la viene pegando. De sus autoras recomiendo Ocho, de Amy Fusselman, e Insomnio, de Marina Benjamin. Y, sobre todo, su último título, Tiempo sin lluvia, de Cynan Jones, que sí, es un hombre, pero llegó a nuestras manos con una gran traducción de la gran Esther Cross y es im-pre-sio-nan-te.
Y aquí, el libro de no ficción de la semana:
Autorretrato sin mí, de Fernando Aramburu, comentado por Federico Lorenz. Para leer Autorretrato sin mí hay que hacer el ejercicio de imaginarse en una habitación que da a un parque otoñal, con álamos al fondo. El lugar de la lectura sólo está iluminado por la luz solar que entra por una ventana amplia, a través de la cual se contempla ese paisaje melancólico. Entonces, la voz del escritor, gracias a una prosa cuidada y muy trabajada, llega hasta nosotros para forzar un pacto de lectura que consiste en que si aceptamos su invitación predominarán los sentimientos antes que cualquier otra cosa. Aquí, el comentario completo.
Espero que les haya gustado el envío de hoy. Para mí fue algo especial.
Y me retiro a seguir buscando libros. ¿Dudas? ¿Sugerencias? ¿Lecturas? Escribime a [email protected]
Va un fuerte abrazo,
Flor.
