Quizás, por mucho tiempo, lo más cercano que nos hemos sentido como sociedad a los robots sean las películas o relatos de ciencia ficción: desde la novela Yo, robot de Isaac Asimov hasta la animación de WALL-E por Disney Pixar, entre tantas más. Sin embargo, ahora estos relatos parecen haber aterrizado en nuestra realidad en cierta escala.
Toyota está desarrollando robots que harán los quehaceres de la casa: desde pelar vegetales hasta limpiar los platos. Este avance se está desarrollando en un laboratorio de investigación de la reconocida empresa japonesa en Cambridge, que fue fundado en 2015.
De acuerdo con Wired, lo más novedoso es que los expertos están utilizando la imitación de humanos para entrenar a estos robots. Una persona le muestra a la máquina cómo se pone la basura en la pala de limpieza y, luego, el robot la práctica y la repite hasta lograr la perfección.
Este sistema de aprendizaje automático se denomina diffusion policy (en español, “política de difusión”) que es similar al que se utilizan en los generadores de imágenes de inteligencia artificial como MidJourney. En síntesis, se basa en evaluar las múltiples posibilidades y fuentes de datos para tomar la decisión de ejecutar una acción correcta.
Así, Toyota quiere combinar este nuevo enfoque con los modelos de lenguaje que potencian ChatGPT, Bard, xAI y otros bots conversacionales, ya que esto le agrega al robot información sobre el mundo físico y así los ayuda a elaborar un sentido común sobre los objetos y cómo deberían usarse.
El conjunto de estas iniciativas invita a que los robots escapen de su estructurada manera de ejecutar tareas, como lo hacen en las fábricas en donde son programados para hacer la misma cosa una y otra vez sin margen. De este modo, podrán adquirir una "personalidad" más flexible para a interactuar en el mundo humano de forma más cercana y real.
Por el momento, los robots están demostrando progreso en la realización de tareas como pelar verduras, utilizar electrodomésticos de cocina y cocinar. Pero todavía cometen ciertos errores cruciales que inhabilitan su comercialización.
Según reporta The Hustle, el objetivo principal de Toyota con la elaboración de estos robots es poder asistir a la población mayor y no activa de los diferentes países. Así, estas personas no quedan segmentadas de la sociedad y pueden seguir viviendo sus vidas de manera independiente.
Este es un debate que ya hace tiempo circula en los titulares. Por ejemplo, un informe reciente publicado por la revista Science Robotics realizado por investigadores de las universidades de Auckland (Nueva Zelanda), Duke y Cornell (Estados Unidos) destaca el potencial de los robots mejorados con IA para funcionar como compañeros.
“Ahora mismo, todas las pruebas apuntan a que tener un amigo de verdad es la mejor solución. Pero hasta que la sociedad no dé prioridad a la conexión social y al cuidado de los mayores, los robots son una solución para los millones de personas aisladas que no tienen otras soluciones”, expresó Murali Doraiswamy, uno de los autores del informe, según el medio News Medical.
De acuerdo con Naciones Unidas, prácticamente todos los países del mundo experimentan un aumento del número y la proporción de personas mayores. Esto puede traer fuertes consecuencias para muchos sectores de la sociedad como el mercado laboral y financiero, vivienda, transporte y, efectivamente, la demanda de bienes y servicios. A esto último, apuntaría Toyota.
De todas formas, aunque la adquisición de robots en nuestras casas se nos hace lejana, muchos ya han comenzado a adquirir dispositivos inteligentes en nuestras viviendas (más conocidos como productos smart home). Por ejemplo, son los altavoces inteligentes. Según el estudio realizado por We Are Social y Hootsuite, los dispositivos de smart home se han convertido en una tendencia importante dentro del público argentino. La penetración de estos dispositivos creció 7,8 % de la población nacional, lo que implica alrededor de un millón de personas.