La red científica World Weather Attribution (WWA) publicó un estudio que afirma que las olas de calor que se están viviendo en Estados Unidos, China y Europa hubiesen sido "casi imposibles" sin el cambio climático. En los últimos días, estas regiones tuvieron temperaturas récord de más de 40 y 50 grados y algunas zonas enfrentan incendios importantes.
La WWA se dedica a estudiar la relación entre los fenómenos meteorológicos extremos y el cambio climático. En su informe, la organización afirmó que estas olas de calor ya no son acontecimientos excepcionales sino que año tras año serán cada vez más intensas y frecuentes mientras no se reduzcan las emisiones de gases de efecto invernadero.
Durante julio, se registraron temperaturas récord en amplias zonas del hemisferio norte: más de 50ºC en el Valle de la Muerte californiano y en el oeste de China, 45,3ºC en la región española de Cataluña y más de 43ºC en Phoenix, Arizona. Según la NASA y el observatorio Copernicus, julio de 2023 terminará siendo el julio más caluroso jamás registrado.
El cambio climático y el consecuente calentamiento global que genera la actividad humana es lo que está haciendo que las olas de calor sean cada vez más intensas y frecuentes. Incluso la WWA lo puso en números: los desajustes en el clima que causamos hicieron "al menos 50 veces más probable" la ola de calor que se está registrando en China.
La World Weather Attribution está integrada por siete científicos de Países Bajos, Reino Unido y Estados Unidos y, para llegar a estas conclusiones, utilizaron datos meteorológicos históricos y modelos climáticos que comparan el clima actual con datos del pasado.
Mariam Zacharian, científica de la WWA, explicó que si el calentamiento global que hoy está en 1,2 grados llega a 2 grados, en treinta años podrían vivirse temperaturas así de extremas cada dos o cinco años. Asimismo, destacó la importancia de que todos los países firmantes del Acuerdo de París cumplan sus compromisos de reducir las emisiones.
Aunque lo que está sucediendo con la temperatura estaba previsto por diversos estudios científicos, la preocupación de los expertos es que está muriendo mucha gente y es por esto que es urgente que los países reduzcan sus emisiones tal como se comprometieron. La próxima conferencia sobre cambio climático, la COP28, será en noviembre en Dubái y se espera que los gobiernos adopten una legislación internacional sobre la eliminación gradual de los combustibles fósiles.
El carbón, el petróleo y el gas natural son los principales tipos de combustibles fósiles y suministran alrededor del 80 % de la energía mundial. Cuando se queman, liberan grandes cantidades de dióxido de carbono y otros gases de efecto invernadero que atrapan el calor en la atmósfera y es por eso que esta actividad es señalada como la principal responsable del cambio climático.