La empresa sueca Modvion construyó una torre eólica de 150 metros utilizando madera laminada cerca de Gotemburgo. El generador de dos megavatios que se encuentra en la parte superior suministra electricidad a 400 hogares.
Para su construcción se empleó madera en lugar del tradicional acero, lo que no solo reduce el peso de la estructura, sino que también tiene un impacto significativo en la huella de carbono asociada a estas infraestructuras.
La madera laminada es un material que no solo ofrece robustez y durabilidad, sino que también otorga una mayor flexibilidad en el diseño y la fabricación. Con una mayor relación resistencia/peso, estas maderas permiten una construcción más ligera y pueden ensamblarse con una pequeña grúa antes de ser ubicadas en su lugar.
Además, pueden unirse con pegamento en lugar de tornillos, lo que reduce la necesidad de inspecciones periódicas. "La madera y el pegamento son la combinación perfecta, lo sabemos desde hace cientos de años", afirmó David Olivegren, cofundador de Modvion, a la BBC. "Como usar madera es más ligero se pueden construir turbinas más altas con menos material".
Asimismo, este tipo de construcción reduce las emisiones de carbono asociadas a la producción de turbinas eólicas. Esta si bien es más barata y limpia que casi todas las forma de generación de electricidad, implica hornos extremadamente calientes y casi siempre la quema de combustibles fósiles. En cambio, el uso de la madera elimina por completo la huella de carbono de los aerogeneradores.
A su vez, se emplea madera de un bosque sostenible. En la torre de la turbina se colocaron unos 200 árboles y la empresa afirma que cada vez que se talan se plantan más.
La iniciativa despertó el interés de algunas empresas energéticas de Europa. Vestas Wind Systems A/S compró el 15 % de la compañía tras ver un modelo de demostración más pequeño, y la italiana Enel Green Power SpA llegó a un acuerdo de cooperación.
El proyecto de Modvion planea producir 100 torres de madera al año para el 2027, transformando así un segmento significativo del mercado de turbinas eólicas hacia prácticas más sostenibles. Otto Lundman, CEO de la empresa contó a la BBC: "La industria construye actualmente 20.000 turbinas al año. Nuestra ambición es que dentro de 10 años el 10% de esas turbinas, unas 2.000, sean de madera".