“Cuando comencé a concentrarme en lo que mi cuerpo podía hacer, mi mentalidad cambió a un lugar de gratitud, lejos del constante diálogo interno negativo. Nuestros cuerpos son realmente milagrosos y sólo tenemos uno, así que también podés disfrutarlo”, propone la profesora de yoga Paula Hines.
En un artículo en The Guardian, la autora de Rest + Calm: Gentle Yoga and Mindful Practices to Nurture and Restore Yourself, junto a otros referentes y expertos, enumeran los consejos más importantes para tener más seguridad o, más conocido por el término en inglés, body confidence.
1. Dejar de lado las dietas de moda, no sirven
La idea de “cuerpo de playa” o “cuerpo de bikini” se basa en la idea desacertada de que las mujeres deben realizar planes de acción a corto plazo para bajar de peso de cara al verano. Pero “necesitamos alejarnos de la mentalidad de auge que a menudo viene con la idea de pérdida de peso”, señala la nutricionista Emma Bardwell.
“Veo a muchas mujeres embarcarse en dietas restrictivas de moda y ayunos prolongados, declarando que 'eliminarán el azúcar por completo' y 'sólo comerán después del mediodía'. Esto es difícil e insostenible”, indicó al medio británico.
2. Vestirse resaltando la personalidad
El cuerpo que ves en el espejo hoy nunca volverá a ser él mismo, asegura la nota. En esta línea, Nickie Reynolds, propietaria de la marca Gold Dust Vintage, explica: “Vestíte con colores que te hagan sentir bien contigo mismo. Esto aumentará instantáneamente tu confianza. Si no estás seguro de cuáles son, simplemente comenzá con los colores que amás. Y experimentá. Podés comenzar con la introducción de 'estallidos' de color”.
Usar ropa llamativa o cualquier cosa que no esconda el cuerpo, levanta el ánimo, asegura Reynolds.
Por su parte, Marleen Beevers es autora de Satisfashion, un libro sobre el uso de la actitud hacia el estilo para forjar la idea de que “sos suficiente". Ella dice que el estilo personal debe consistir en expresar lo que pensamos de nosotros mismos: “¿Quién eres? ¿Y qué quieres en la vida? Enfócate en las fortalezas de tu personalidad. Desafía tus pensamientos negativos con afirmaciones positivas. Limite su exposición a desencadenantes negativos y a las redes sociales”.
3. El descanso es prioritario
Hines aconseja: “No podés tener confianza si estás cansado o quemado. Puede que no se trate de tomar una siesta, pero es esencial encontrar algo que funcione para usted y que sea bueno para su sistema nervioso. Hace poco vi un video en las redes sociales de un niño que le preguntaba a su hermanito que lloraba si había dormido la siesta. Él no lo había hecho. Así que su respuesta a su hermano menor fue: 'Bueno, ¡necesitas uno!' Fue divertido e identificable, pero creo que esto también se aplica a los adultos. El descanso te da perspectiva y claridad”.
4. No siempre estamos en modo body positivity
Nadie se puede amar a sí mismo constantemente, por más que eso sea lo que muchas veces leemos y escuchamos. Como reflexiona Hines: “Todos tenemos días corporales negativos. No les creo a quienes dicen que nunca les pasa. Pero una cosa que sugiero es que te concentres en lo que tu cuerpo hace por ti, ya sea para ayudarte a pasar el día o lograr tu mejor marca personal en el gimnasio”.
Como contamos en otra nota, un estudio encontró que el fenómeno body positive puede aumentar la vigilancia corporal o body checking e incrementar la aceptación de la cirugía plástica. En concreto, el problema se observó cuando las publicaciones en redes sociales de positividad corporal estaban sexualizadas, ya que “pueden promover una representación objetivada de los cuerpos de las mujeres, lo que resulta en un factor de riesgo para las preocupaciones relacionadas con el cuerpo”, según el paper publicado en Computers in Human Behavior. Podés leerla acá.
Finalmente, si lo que crees que necesitás es realizar cambios, los referentes consultados por The Guardian coincidieron que es mejor hacerlos de a pasos pequeños y fáciles. Como concluye el artículo: “Si el cambio de algún tipo es realmente su objetivo, buscá hábitos pequeños y consistentes que pueda mantener. Buscá consejos de salud sensatos que resuenen con usted como individuo. No somos todos iguales. No todos queremos tener el mismo aspecto. Y no todos estamos motivados por los mismos objetivos. Es correcto. Y si el cambio no es su objetivo, también está bien”.