Donar médula ósea: un gesto simple que puede salvar una vida- RED/ACCIÓN

Donar médula ósea: un gesto simple que puede salvar una vida

 Una iniciativa de Dircoms + INFOMEDIA

La ciencia ha abierto caminos hacia la curación de enfermedades complejas. Y una de ellas es el trasplante de médula ósea.

Donar médula ósea: un gesto simple que puede salvar una vida

Foto: INCUCAI. Intervención: Julieta de la Cal.

¡Buenas tardes! La ciencia ha abierto caminos hacia la curación de enfermedades complejas. Y una de ellas es el trasplante de médula ósea.
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Intervención: Julieta de la Cal.

Para hablar de este tema, es necesaria una distinción. Existe una médula espinal, que va por dentro de la columna vertebral: es la que tiene las terminaciones nerviosas. Desde el cerebro lleva la conectividad eléctrica a todo el cuerpo. Va por adentro de las vértebras. Básicamente tiene axones de nervios, la parte larga de las neuronas. Llevan y reciben la conductividad eléctrica a todo el organismo. Llevan la sensibilidad al cerebro y del cerebro al resto de organismo enviando señales para que funcione el organismo.

Por otro lado, y es muy importante distinguirlo, está la médula ósea: es algo muy distinto a la médula espinal. Para quienes somos más grandes, es el caracú, la parte de adentro de los huesos. Los huesos grandes tienen adentro como una parte más hueca, liviana. Por fuera está la parte dura y adentro hay cavidades. Ahí adentro hay una sustancia: la médula ósea. Se encuentra en los huesos grandes como el fémur o el húmero, en huesos de la cadera.

La función de la médula ósea es generar tres tipos de células, que nos suenan, son conocidos: las plaquetas (aquellas que cuando nos cortamos y sangramos corren para tapar este agujero), los glóbulos rojos (que llevan oxígeno a todas partes) y los —famosos en época de covid— los glóbulos blancos (encargados de las defensas del organismo).

Esta distinción la hacemos porque es muy común escuchar “necesita un trasplante de médula”. Y a todos nos viene un poco esta sensación de la médula espinal. Y una médula espinal sabemos que es la que no tiene que lastimarse, ni dañarse. Que es vital. Da cierto temor la palabra médula, que alguien debe donar. Pero no se toca la columna vertebral.

La médula ósea se extrae con mecanismos simples, con los cuales no vamos a aburrir en este espacio. Es como una intervención o extracción de sangre. Es lo que está en nuestros grandes huesos. El trasplante de médula ósea se hace cada vez con más frecuencia.

Cuando esta práctica comenzó, hace entre 30 y 40 años, era una alternativa difícil y final. Tenía mucho que ver con enfermedades muy complejas como leucemias o linfomas. El éxito en los 89 o 90 no superaba el 30%. Podemos celebrar los avances de la ciencia que han estirado este número hasta el 80-90%. Es una alternativa maravillosa, un tratamiento efectivo.

Ahora bien, en la actual situación, en la medida en que la ciencia avanzó, cuando alguien tiene esta necesidad de médula, se necesita a alguien compatible. Por suerte la solidaridad ha generado un banco: hay un banco en Argentina y uno mundial. Si alguien necesita un trasplante de médula ósea y no encuentra un familiar compatible puede hacer una búsqueda global, bien hecha, con miles de personas del mundo. Al donar sangre podés decir que quisieras donar médula ósea. Van a tipificar tu sangre. Van a guardar la información y algún día quizás digan: “Hay una persona que necesita tu médula ósea”. Es un acto sencillo, una extracción simple, que permite mejorar o de salvar la vida de otra persona.


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La semana pasada hablábamos de Emily, la niña de 7 años que desde hace cinco lucha contra una leucemia medular y extramedular y que, agotados los recursos en Argentina (incluida la posibilidad de un trasplante), se aferra a la esperanza de un tratamiento no convencional en Barcelona. Para eso, ella y su familia enfrentaban, hace solo dos semanas, un reto inmenso: tenían 15 días para juntar nada menos que 80 millones de pesos.

La campaña Mi ayuda para Emily desató una oleada de solidaridad que cada día batió nuevos récords. Y en 11 días se juntaron más de 86 millones, que servirán para costear el tratamiento de Emily en la ciudad catalana. ¡Más de 8 millones de pesos por día!

Donaciones de Argentina y de lugares tan remotos como Arabia Saudita. Iniciativas ingeniosas, como personas que, con su profesión, decidieron ayudar intercambiando cursos a cambio de donaciones. Comerciantes que hicieron sorteos entre quienes donaran. Partidos y eventos a beneficio. La comunidad se manifestó de mil formas conmovedoras.

 La niña de 7 años, quien lucha contra la enfermedad desde los 2, necesitaba recaudar esa cantidad en 15 días. En solo 11, una campaña en redes sociales logró juntar 86 millones. “Gracias a Dios por esta travesía increíble. Gracias por apoyarnos en el momento más difícil de nuestra vida. Gracias a ustedes por acompañarnos, por unirse a nuestra lucha y por el inmenso amor que nos sostiene y nos impulsa a seguir”, dijo la familia en un posteo en redes.

Emily y su familia ya están en Barcelona para el tratamiento. Con los recursos económicos pero, sobre todo, con el abrazo hermoso de la comunidad. Podés seguir las novedades de su tratamiento en el sitio oficial de la campaña y la cuenta de Instagram.

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Cuatro preguntas a Ana Corbelle, directora de Diagonal [Por David Flier]. Diagonal es una asociación civil que trabaja por la reinvención laboral de las personas mayores de 45 años. Para esto, desarrolla un Programa de Reinvención Laboral (PRL) que es gratuito y puede seguirse online desde cualquier parte del mundo. De este programa, a cargo de un equipo de expertos en las temáticas de empleabilidad y diversidad, ya participaron más de 4.500 personas. Podés conocer más del programa acá.

—¿Cómo modificó la pandemia el panorama laboral para personas mayores de 45 años?
—La pandemia nos cambió y nos hizo reflexionar sobre cómo queremos trabajar, y también en cómo queremos y necesitamos que sea el nuevo mundo laboral. Hoy el trabajo puede ser híbrido, presencial y/o remoto. Hay más conexión virtual y la transformación digital ya es parte de nuestro día a día. La esperanza de vida se extendió a más de 80 años. Las personas mayores de 45 años están cada vez más activas y con más energía para brindar valor en el mundo laboral. Hoy alguien de 60 o 65 años tal vez no está pensando en jubilarse sino en cómo seguir aportando valor en las organizaciones o en sus emprendimientos. Desde Diagonal acompañamos a las personas +45 y a las organizaciones a transitar ese cambio con una nueva mirada y con las herramientas necesarias para este nuevo contexto. 

—¿Notás más consciencia en las empresas sobre las capacidades de las personas de más de 45 años o todavía impera el edadismo?
—Cada vez hay más conciencia en las empresas de que el talento no tiene edad. Si bien la diversidad generacional no es un tema nuevo lo que sí es novedoso es que el tema está en agenda. Y esto quiere decir que hay conciencia de la importancia de desarrollar y trabajar en la diversidad con todo lo que eso trae: creatividad, producción, distintas miradas y soluciones innovadoras entre otros factores. Es necesario aprovechar las habilidades que una persona de esta generación puede ofrecer a una empresa y para esto es fundamental derribar los sesgos culturales que giran en torno a esta población y centrarse en las competencias que cada perfil ofrece al momento de cubrir las distintas posiciones.

—¿Cuáles son los principales desafíos para personas mayores al acercarse al mercado laboral?
—Los mayores desafíos para acceder a las oportunidades de empleo están basados en los sesgos con respecto a la edad. Existe la creencia de que “esta generación no sabe manejar la tecnología”; que “un joven no podrá liderar a alguien que lo supere en edad”; que “a mayor edad, mayor rigidez y menos actualización”; “a mayor trayectoria o edad tendrán mayores pretensiones a nivel salarial o de jerarquía”, entre otros juicios que no se ajustan a la realidad de toda esta población. De esta manera, en la Argentina, 8 de cada 10 búsquedas laborales excluye a los +45 por lo cual muchas personas quedan fuera de las oportunidades laborales cuando podrían aportar valor a cualquier puesto laboral.

—¿Qué aprendiste como parte de Diagonal?
Estoy aprendiendo muchas cosas. La principal es que todas las personas tenemos mucho valor para aportar más allá de la edad que tengamos. Cada una tiene su recorrido laboral, profesional y personal que puede enriquecer cualquier espacio laboral. Aprendí que todo tiene sus procesos y sus tiempos. Hace años la temática de los mayores de 45 años no estaba en agenda porque no se registraba como un problema. Hoy, es un tema que no solo está en agenda sino también se está desarrollando fuertemente lo que se conoce como Economía plateada. Quienes trabajamos en Diagonal aspiramos a un mundo laboral donde no haya discriminación por edad y donde haya más oportunidades laborales. Sabemos que estamos en ese camino.

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Un último recordatorio sobre la gran cita que tenemos pasado mañana, exclusiva para suscriptores de OXÍGENO: una conversación virtual con Alexia Ratazzi, psiquiatra infanto-juvenil especialista en autismo, cofundadora de PANAACEA. En abril, nuestra campaña del mes trata sobre cómo ayudar a personas con autismo. Alexia es referente en este tema: un tema complejo y que nos llama a aprender más en busca de lograr una sociedad más inclusiva. David Flier y yo vamos a moderar la charla, en la cual vas a poder hacer preguntas y sacarte dudas sobre el espectro autista.

📅 Acordate de que la reunión va a ser este miércoles 27 de abril a las 12:30. Para sumarte, hacé clic acá.

Y a propósito del autismo, la semana pasada publicamos una nota acerca de la importancia de conocer cuántas son las personas con autismo que viven en nuestro país. Se titula "Por qué cuesta tanto saber cuántas personas tienen autismo y qué oportunidad histórica presenta el próximo censo" y podés leerla acá.

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Intervención: Julieta de la Cal.

Hay otros dos contenidos que publicamos en RED/ACCIÓN la semana pasada y que quiero recomendarte.

Uno de ellos es una nota sobre una iniciativa creada en Brasil luego de los Juegos Olímpicos de Río 2016 y que se puso en marcha el año pasado en la Ciudad de Buenos Aires con 46 organizaciones comunitarias. Consiste en abrir espacios seguros para que chicas de 13 a 18 años que viven en barrios populares practiquen deportes y accedan a información sobre sus derechos, salud e inclusión financiera, entre otras herramientas. Acá podés leer el texto de Florencia Tuchin.

La otra habla de Lía, Yamilet y Majd. Ellas y él viven en Argentina hace años, pero nacieron en lugares tan distantes como Venezuela, Colombia y Siria. Y sus vidas nos muestran por un lado la enorme solidaridad del pueblo argentino para recibir a personas migrantes, pero también de la riqueza que reside en la interculturalidad.  Podés leer estas historias acá.

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De a poco, el frío comienza a sentirse. Pero una cosa es sentirlo y otra cosa es sufrirlo sin un techo bajo el cual dormir. Las personas en situación de calle constituyen el grupo más vulnerable en este sentido.

Y por eso, para ellas, nuevamente es necesaria la solidaridad de nuestra gente. La que expresan, por ejemplo, quienes participan de la campaña “Tejido Solidario”: una iniciativa del Centro Educativo Ceferino Namuncurá, en el barrio La France de Córdoba. Allí se confeccionan frazadas para personas en situación de calle. La propuesta apunta a que cada estudiante pueda sumar lanas y cuadraditos de 20 x 20cm, que luego serán parte de las mantas.

En esta edición de la newsletter, en vísperas del invierno pasado, recordábamos cómo ayudar a quienes viven en situación de calle y enfrentan el frío.

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En RED/ACCIÓN hemos hablado del valor de la tecnología para generar una sociedad más inclusiva. Y también hemos enfatizado varias veces que el camino para crear soluciones con impacto es trabajar en red, como una gran comunidad.

Por eso celebramos la iniciativa del Centro de Entrepreneurship del IAE (la escuela de Negocios de la Universidad Austral). Junto con cinco emprendedores, el centro llevará adelante este jueves 28 de abril de 9 a 13 un encuentro sobre la actitud emprendedora y la tecnología como aliados para la inclusión de personas con discapacidad. 

El objetivo es, por un lado, dar visibilidad y difusión a estos proyectos y al trabajo que vienen haciendo, y, por otro, generar un espacio de encuentro con distintos representantes y actores involucrados (sociedad civil, ONG, sector público, académicos, emprendedores, empresas, etc.) y concientizar sobre cómo la tecnología y la innovación son aliados para desarrollar soluciones de impacto.

Si querés participar, podés entrar en este link (no se necesita inscripción previa; el ID de la reunión es 9204 3545 414).


Cuidate mucho, cuidalas mucho, cuidalos mucho.
Te mando un gran abrazo.

Juan