El pueblo irlandés vota en un referéndum para modificar el lenguaje sexista de su Constitución - RED/ACCIÓN

El pueblo irlandés vota en un referéndum para modificar el lenguaje sexista de su Constitución

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Los ciudadanos irlandeses están ante la posibilidad de cambiar los artículos referidos a lo qué se considera una "familia" y sobre a quién corresponden las tareas de cuidado.

El pueblo irlandés vota en un referéndum para modificar el lenguaje sexista de su Constitución

Foto de Edmond Dantès: https://www.pexels.com/es-es/foto/gente-mujer-firmar-invierno-7103012/

Los ciudadanos de Irlanda votan este viernes 8 de marzo dos nuevas propuestas a través de referéndums para modificar el lenguaje y la definición del rol de la mujer en el hogar y la conformación de una familia.

Las mesas de votación abrieron a las 7:00 GMT y cerrarán a las 22:00 GMT, de acuerdo con The Guardian. Los ciudadanos mayores de 18 años (alrededor de 3,3 millones de personas) tienen derecho a votar.

En 1937, se adoptó por referéndum una nueva Constitución en Irlanda, la cual apoyaba ciertos valores de la Iglesia Católica. Con el tiempo, la transformación social permitió reflejar una serie de cambios. En el país europeo, ya se realizaron dos históricos referéndums: uno en 2015, que derivó en la legalización del matrimonio igualitario, y otro en 2018 a partir del cual se derogó la enmienda que prohibía el aborto.

¿Cuáles son las dos propuestas?

La primera pregunta a los irlandeses es si están a favor de modificar el artículo 41 de la Constitución respecto al concepto de familia. Hoy el artículo 41.1 dice: "El Estado reconoce a la familia como el grupo natural primario y fundamental de la sociedad, y como institución moral poseedora de derechos inalienables e imprescriptibles, antecedente y superior a todo derecho positivo". Lo que se complementa por el artículo 43.1: "El Estado se compromete a custodiar con especial cuidado la institución del matrimonio, en la que se fundamenta la familia, y a protegerla contra cualquier ataque".

De acuerdo con The New York Times, el nuevo lenguaje utilizado reconocería a una familia, "ya ​​sea fundada en el matrimonio o en otras relaciones duraderas", como la unidad fundamental de la sociedad. Las palabras "en las que se fundamenta la familia" se eliminarían de la cláusula sobre la responsabilidad del Estado de proteger la institución del matrimonio.

Respecto a la segunda propuesta, se buscará modificar el artículo 41.2 que dice que "por su vida en el hogar, la mujer presta al Estado un apoyo sin el cual no puede realizarse el bien común". Por ello, el Estado irlandés "procurará que las madres no se vean obligadas, por necesidad económica, a trabajar en detrimento de sus deberes en el hogar".

Según explica el medio estadounidense, si los votantes eligen a favor, se eliminaría la referencia al papel de la mujer en el hogar. Un nuevo artículo, el 42.2, reconocería y protegería a todos los cuidadores familiares, diciendo: "El Estado reconoce que la prestación de cuidados por parte de los miembros de una familia entre sí en razón de los vínculos que existen entre ellos brinda a la sociedad un apoyo sin el cualel bien común no puede lograrse, y se esforzará por apoyar dicha disposición".

Las opiniones

Leo Varadkar es desde 2022 Taoiseach de Irlanda, el Primer Ministro del país. "Un voto por el 'No' sería un revés para el país, francamente. Le diría a mucha gente, cientos de miles de personas y niños, que no forman parte de una familia en lo que respecta a nuestra Constitución, y eso sería un paso atrás. También significaría, en relación con el cuidado, que se mantendría el lenguaje muy anticuado sobre las mujeres en el hogar y los deberes de la madre en el hogar. Se perdería la oportunidad de añadir un reconocimiento especial a los cuidadores familiares", afirmó a The Irish Times.

Mary McAleese, expresidenta de Irlanda, hizo una campaña a favor de las propuestas. Dijo en The New York Times que pensaba que los cambios "reflejarán el abrumador impulso por la igualdad y la inclusión que es un sello distintivo de la Irlanda moderna".

Por su parte, Laura Perrins, abogada irlandesa y cofundadora de The Conservative Woman, afirmó a The Irish Times que el referédum solo borraría de la Constitución la única mención a las mujeres y las madres. "No sé por qué, de verdad, cualquier mujer, y en particular las madres, se votarían a sí mismas fuera de la Constitución. No hay nada sexista en la palabra mujer y no hay nada sexista en el reconocimiento de que el trabajo que hace en el hogar sirve al bien común", dijo.

Desde el grupo Lawyers for No ("Abogados por el No") afirman que el cambio constitucional "tendría […] consecuencias a largo plazo en ámbitos del derecho como la familia, la fiscalidad y la propiedad, y significaría 'ningún derecho justificable' para las personas que prestan o necesitan cuidados".

En esta línea, un caso que sería afectado por el referéndum es el de la apelación a la Corte Suprema de Irlanda por parte de una madre de un niño con discapacidad que tendrá lugar en algunas semanas. A ella se le denegó la prestación completa para cuidadores, sujeta a la comprobación de recursos, porque el salario semanal de su marido era de 850 euros. La apelación que será presentada considera la existencia del artículo 41,2 y la importancia del trabajo de cuidados, según France 24.

Brenda Power, periodista y abogada que forma parte de un grupo de abogados que instan a votar "No" en este referéndum, declaró en una rueda de prensa que está "muy preocupada" por el hecho de que el referéndum se celebre antes de la apelación.