Hace más de 70 años, una escultura de Auguste Rodin desapareció de los museos de Glasgow en Escocia. La obra, una réplica en yeso de una de las seis figuras que componen la famosa escultura Los burgueses de Calais (1884-85) del artista, fue vista por última vez en una exposición al aire libre en el Kelvingrove Park en el otoño de 1949.
La noticia de la escultura desaparecida fue dada a conocer por el periódico británico The Times, que descubrió su ausencia junto a la de otras 1.750 piezas que no podían ser localizadas en los museos de la ciudad.
Un portavoz de Glasgow Life, la organización sin fines de lucro que gestiona los Museos de Glasgow, explicó a la revista Hyperallergic que la figura de Jean d'Aire, que mide casi dos metros, sufrió algunos daños durante la exhibición de 1949. A partir de aquel entonces, no se supo más nada sobre su paradero.
Desde su fundación en la década de 1860, la gestión y registro de la Colección de Museos de Glasgow mejoró significativamente. Hace 30 años se introdujo una base de datos centralizada y hace 20 se mejoraron las instalaciones de almacenamiento. Sin embargo, las 1.736 obras siguen sin poder ser localizadas, de las cuales 254 figuran como robadas y otras 1.482 no han sido vistas por un significativo período de tiempo.
Cabe destacar que los museos suelen ser reacios a informar al público sobre obras perdidas. Este año, el presidente de la junta del Museo Británico de Londres reveló a BBC que la institución había registrado 2.000 objetos desaparecidos, algunos de los cuales supuestamente fueron robados por un curador en un escándalo muy publicitado que llevó a la renuncia anticipada del director.
Aunque la obra desaparecida en Glasgow es rara, existen otras siete réplicas de yeso de Jean d'Aire en colecciones públicas. Además, hoy en día se pueden encontrar versiones en cerámica y bronce de la obra completa Los burgueses de Calais.
Jérôme Le Blay, responsable del Comité Rodin (que estuvo trabajando durante casi dos décadas en la creación de un catálogo de las obras del artista) señaló que, aunque las obras de bronce y mármol de Rodin pueden ser más conocidas, las esculturas en yeso son más importantes para el "espíritu del artista". Estas obras permiten ver su huella de forma bastante literal, ya que tienen en ellas sus huellas dactilares.
Glasgow Museums adquirió la réplica en yeso de Rodin en 1901. Según Le Blay, Rodin había lanzado su carrera al estrellato mundial tras una exposición en París en 1900, por lo que mandó réplicas en yeso de sus esculturas a instituciones en todo el mundo. El yeso era la forma más asequible para él de llegar a un público más amplio: era económico y se podía hacer en uno o dos días.
A pesar de esta pérdida, los otros cinco personajes de Los burgueses de Calais permanecen en los Museos de Glasgow, aunque uno de ellos también está dañado. Patrick Crowley, curador de arte europeo del Centro Cantor de Artes Visuales de Stanford, comentó que Rodin solía mostrar sus yesos al aire libre para evaluar cómo respondían a la luz.
La escultura de Rodin permanece desaparecida desde hace 70 años y, según Le Blay, C'est la vie (así es la vida).