El Departamento de Justicia de Estados Unidos acusó a Google de asociarse ilegalmente con fabricantes de teléfonos y empresas de navegadores de internet para dejar fuera a la competencia en materia de motores de búsqueda. El juicio comenzó ayer ante un tribunal federal de Washington DC y se prevé que dure 10 semanas.
El gigante de Silicon Valley concentra el 90 % de los motores de búsqueda, según Similarweb. De acuerdo con el Departamento de Justicia, lo logró pagándole más de 10.000 millones de dólares al año a fabricantes de dispositivos como Apple, compañías de telecomunicaciones como AT&T y fabricantes de navegadores como Mozilla.
John Schmidtlein, abogado principal de la compañía, afirmó que Google no es el guardián de internet y que si gana en el mercado es por méritos propios. Kent Walker, presidente de Asuntos Globales de Alphabet, la empresa matriz de Google, afirmó en un artículo publicado en respuesta al Departamento de Justicia que “las personas usan Google porque es útil” y que “con pocos clics uno puede cambiar el motor de búsqueda determinado en Android y iPhone”.
El juez Amit Mehta será quien dicte la sentencia en el caso. Si determina que Google infringió la ley, considerará formas de solución frente al problema. El Departamento de Justicia todavía no mencionó qué medidas pedirá que el tribunal le imponga a Google si llegara a ganar el caso. De cualquier manera, las partes podrán recurrir ante un tribunal de apelaciones y, llegado el caso, a la Corte Suprema de Justicia.
Por otro lado, si Google pierde el caso su imagen e influencia podría verse debilitada en la industria tecnológica y su competencia en el mercado en Silicon Valley. Asimismo, podría verse obligada a separar el servicio de búsqueda de sistemas operativos como Android o Google Maps.
Este juicio es el primero que se realiza a un gigante tecnológico luego del juicio a Microsoft de 1998. En aquella instancia se lo acusaba de abusar de la posición de dominio de su sistema operativo Windows para imponer su navegador Explorer.