El asma es un proceso inflamatorio crónico de las mucosas de las vías aéreas inferiores, es decir, de los bronquios. Se caracteriza por la dificultad respiratoria, sibilancias (chillido del pecho), sensación de falta de aire y/o tos. Como tal, es una de las enfermedades crónicas no transmisibles más comunes, que afecta a más de 260 millones de personas y es responsable de más de 450.000 muertes al año en todo el mundo, la mayoría de las cuales son evitables.
En Argentina, la prevalencia es del 9,5 %. En los últimos años aproximadamente el 40 % de los pacientes con asma son menores de 70 años y el 65 % son mujeres, explica en diálogo con RED/ACCIÓN la médica especialista en Alergia e Inmunología Anahi Yañez, asesora científica de la Asociación Argentina de Pacientes con Asma (AApasma).
La experta desmiente cinco mitos muy extendidos.
1- Mito: "El asma es una enfermedad de la infancia"
“El asma es un proceso inflamatorio crónico que puede aparecer en cualquier época del desarrollo de un individuo. Hoy conocemos que hay asmas de ‘reciente comienzo’, es decir, que empiezan en la primera infancia y otras de ‘comienzo tardío’, que son aquellas que son más frecuentes en las mujeres y que pueden aparecer a partir después de los 40 o 50 años”, explica Yañez.
2- Mito: "El asma se puede curar"
La especialista define: “El asma no se cura, se controla. Al ser un proceso inflamatorio crónico el objetivo del diagnóstico y del tratamiento adecuado es que el paciente no tenga síntomas, no tenga despertares nocturnos, no concurra a la guardia, no tenga exacerbaciones. A esto se le llama asma controlada. Sin embargo, la mayoría de los pacientes, no sólo a nivel mundial, sino también en la Argentina, presentan un asma no controlada”.
3- Mito: "Las personas con asma no deberían hacer ejercicio"
Aunque suele preocupar que el ejercicio pueda desencadenar un ataque de asma, Yañez asegura que “cuando tenemos un diagnóstico y un tratamiento adecuado, que puede ser para un asma leve, moderada o severa, la indicación de la actividad física forma parte de todos los cuidados para mantener el control. De ninguna manera un paciente con diagnóstico de asma debe privarse de la actividad física”.
4- Mito: "Los ataques de asma siempre requieren un desencadenante"
El 85 % de las asmas son de origen alérgico, es decir, se dan respuesta a los ácaros del polvo doméstico, los hongos ambientales, los pólenes, algunos alimentos o medicamentos, explica la especialista. Sin embargo, hay otro tipo de asma que no es alérgico. Además, hay que tener en cuenta que las exacerbaciones se pueden producir también porque el paciente presenta una virosis, un resfriado común o una gripe, agrega. Otros desencadenantes son el cambio climático y la polución ambiental, que han aumentado notablemente en los últimos años.
5- Mito: "Los asmáticos siempre tienen dificultad para respirar todo el tiempo"
El asma se puede presentar de manera leve, moderada o grave, por lo que los síntomas van a depender de la severidad del cuadro y del control que lleve la persona. “El paciente puede tener sensación de falta de aire, chillido del pecho, tos. Y no hay que olvidarse que muchos pacientes con asma tienen comorbilidades: enfermedades que coexisten con el asma y forman parte de procesos inflamatorios de la vía aérea superior, como son la rinitis, la rinosinusitis crónica y alguna otra patología de origen alérgico”, sostiene Yañez. Además, enfatiza que “hay que tener en cuenta que muchos pacientes en Argentina y a nivel global están muy subdiagnosticados y subtratados”.
Mes de concientización
Durante mayo se celebra el mes de concientización sobre el asma con el lema “La educación sobre el asma empodera”, que enfatiza la necesidad de capacitar para controlar la enfermedad y reconocer cuándo buscar ayuda médica. Yañez invita a los interesados a estar atentos en las redes (@aapasma en Instagram y @Asociación Argentina de Pacientes con Asma en Facebook) para poder inscribirse y que aquellos pacientes que necesiten confirmar el diagnóstico o tratar su asma concurran a los lugares en los que se va a desarrollar la campaña.