“El 80% de los libros vende menos de 100 copias” comenta Nina Hervé, jefa de Rough Trade Books (la disquería independiente originaria de Londres con sedes en Escocia y Nueva York). Esto implica varias cosas para la industria editorial. En primer lugar, casi no existen autores que vivan exclusivamente de escribir. La mayoría tiene otros trabajos o un segundo ingreso. En segundo lugar, como comenta Hervé, “Se acabaron los tiempos en los que recibías un adelanto por una obra y, por encima de eso, un montón de plata por las ventas. En el caso de Rough Trade, tenemos el mismo trato con todo el mundo: una división 50/50 de lo que queda después de los costos”.
En Argentina, sin embargo, hay algunos números esperanzadores y también otras preocupaciones. Según una encuesta de Statista, el 45% de 2000 personas entre 28 y 64 años compraron un libro (en formato físico) en 2022. Tal como cuenta esta nota de Télam, también en ese año la industria editorial se estaba recuperando de la pandemia y, con el aumento de producción, se enfrentaron al problema de la falta de papel y su escalada de precios. Ese mismo año, el papel ilustración (utilizado para tapas) tuvo un incremento interanual de cerca de 250%, y el de interiores tuvo aumentos superiores al 100%.
Otro dato un tanto desconocido es que se trata de una industria lenta, quizás una de las últimas que quedan. “Típicamente, el proceso desde el pitch hasta tener un libro impreso en tus manos toma entre 18 meses y dos años, y alguien que no haya editado nunca no tiene forma de conocer esos tiempos” comenta Bridget Watson Payne, autora y directora editorial en Chronicle Books.
Sin embargo, tanto en el exterior como en Argentina, hay algunas editoriales que buscan agilizar este proceso. La editorial PAM!, por ejemplo, fue creada para publicar autores independientes cuyas obras muchas veces no ven la luz por todas las complicaciones que se encuentran en el proceso tradicional. Su consigna está basada en la creencia de “que el futuro editorial está en la colaboración entre autores y editores bajo un modelo de publicación transparente, y en la consecuente explosión de la bibliodiversidad”. A Nina, de Rough Trade, dos años de tiempo le parece “una barbaridad”. Donde ella trabaja, querían hacer la diferencia en términos de velocidad, por lo que la principal producción de Rough Trade Books son folletos o fanzines, y obras largas de ficción y no ficción.
Una vez aclaradas las cuestiones monetarias y temporales, para los valientes y convencidos de que aún vale la pena el esfuerzo para publicar es importante conocer todo lo que sigue a escribir y terminar una obra. Estos pasos son:
Edición y corrección ortotipográfica
Después de las noches de insomnio y los días poseído (en el buen sentido de la palabra) por tu propio libro, siempre es bueno tener un par de ojos extra. Si llevas trabajando tanto tiempo que casi te lo sabes de memoria, no lo vas a poder leer con frescura y detectar sus errores, ya sean de contenido o de tipeo.
El proceso de edición puede ser duro; uno entrega algo que siente muy íntimo y propio, y otra persona le introduce cambios. Lo mejor para que esto sea lo más ameno posible es no tomar las correcciones como si fueran personales; esta es la oportunidad no sólo para mejorar nuestra obra, sino también para aprender y mejorar nuestra escritura.
Maquetación
De un archivo digital a uno en papel, con dos páginas, donde todos los capítulos tienen que empezar en la página derecha, donde hay algunas hojas en blanco al principio y muchos otros pequeños detalles, han de intervenir las manos mágicas de un diseñador editorial.
Impresión
Las imprentas suelen tener sus tiempos para hacer las copias, lentos aunque siempre depende de con qué se las compare. Además, es importante tener en cuenta que muchas tienen como requisito un número mínimo de copias, número que hay que pensar en relación a la posibilidad de de venta que tenemos
Distribución
Llegar a las mesas de librerías también puede requerir estar inmerso en la red de contactos y tratos entre editoriales y locales. En el caso de hacer una distribución totalmente independiente (por ejemplo, con una página web de ventas), puede ser conveniente tener un agente de prensa que consiga más visibilidad para nuestro proyecto: citas en la radio o con streamers, notas y visibilidad general.
Conociendo todos los pasos, los factores a favor y los obstáculos a enfrentar, ¡animate si adentro tuyo vive un libro! Probablemente no haya un sentimiento igual a el de haber dejado tu perspectiva para el mundo, el haber creado algo que te enorgullece o incluso la caricia al ego de decir que sos un autor publicado.
