Cómo seleccionar vídeos adecuados para uso educativo - RED/ACCIÓN

Cómo seleccionar vídeos adecuados para uso educativo

 Una iniciativa de Dircoms + INFOMEDIA

Internet está repleto de vídeos divulgativos a los que la comunidad docente recurre constantemente para generar interés sobre temas concretos, o para ilustrar algún concepto de su temario. Y esto sucede aunque dichos vídeos no hayan sido creados con fines educativos. Además, el alumnado accede también a ellos para reforzar su aprendizaje. Su eficacia para educar depende de algunos factores como la claridad audiovisual, la duración, y sus elementos (como animaciones y gráficos).

Cómo seleccionar vídeos adecuados para uso educativo

Lithiumphoto/Shutterstock

Este aspecto se puso de manifiesto al comienzo de nuestra investigación, en la que analizamos el uso educativo de un canal de YouTube que no tenía un propósito pedagógico. Sorprendentemente, de 912 usuarios encuestados un 72.7 % declaró utilizarlo con fines educativos.

Ante esta realidad tan aplastante surge el siguiente planteamiento: si realmente desde el ámbito de la educación se hace un uso tan elevado de los recursos divulgativos, ¿cómo podríamos, desde la creación de contenidos, optimizar la producción para este fin? ¿Cuáles son las características de los vídeos que más se valoran desde la perspectiva pedagógica? ¿Qué tiene que decir a este respecto la investigación actual?

Carga cognitiva esencial

Según define la teoría cognitiva del aprendizaje multimedia, la carga cognitiva esencial es aquella relacionada con el procesamiento de la información para crear representaciones mentales en la memoria de trabajo durante el proceso de aprendizaje. Es la carga cognitiva determinada por la dificultad del contenido a procesar. Por lo tanto, esta carga cognitiva aumenta cuanto más compleja y abstracta sea la disciplina de estudio.

Si pretenden contribuir a lidiar con esta carga cognitiva, los vídeos deben servir de apoyo visual relevante a las explicaciones. Así, se debe priorizar la selección de aquellos vídeos que incluyan animaciones y gráficos para ilustrar los conceptos explicados. De esta manera, se favorece la transmisión de la información a través del doble canal auditivo y visual y se reduce la carga cognitiva.

También es adecuado que los vídeos muestren de forma explícita las expresiones matemáticas relevantes, acompañadas de una ilustración de lo que representan y de una explicación en voz.

Estilo comunicativo y calidad audiovisual

Por otra parte, la carga cognitiva externa tiene que ver con la forma de presentación de la información y las posibles distracciones asociadas a ella. Dar explicaciones demasiado largas, o usar recursos visuales que distraen y no son relevantes para la explicación, contribuye al aumento de esta carga cognitiva.

La calidad audiovisual es prioritaria para minimizar las distracciones ocasionadas por un audio o imagen defectuosos (con eco, saturado, con mala iluminación, borroso o mal encuadrado). El estilo comunicativo debe ser cercano y claro, gozar de un ritmo de explicación adecuado y mantener el interés de la audiencia.

La importancia de la duración

Es conveniente seleccionar vídeos con explicaciones eficientes y bien dirigidas al tema central. Esto está relacionado parcialmente con la duración de los vídeos, aunque no como parámetro absoluto. Temas más complejos requerirán de más tiempo que otros conceptos más sencillos, pero si comparamos dos vídeos sobre la misma cuestión será una buena práctica seleccionar aquel cuya explicación sea más concisa y ordenada.

En nuestra última investigación analizamos durante 6 años el declive de la tasa de retención en vídeos didácticos conforme aumenta su duración. Comprobamos que, cuanto más largos son los vídeos, menos porcentaje de estos es visualizado por la audiencia. Siempre y cuando el tema a tratar lo permita, es deseable que los vídeos que seleccionemos tengan una duración de entre 5 y 15 minutos.

La audiencia de vídeos educativos es más susceptible a abandonar vídeos largos que la de vídeos divulgativos, probablemente por la búsqueda de una finalidad práctica.

Carga cognitiva relevante: contextualización y conexión de temas

En último lugar, la carga cognitiva relevante se refiere a la vinculación de la nueva información con la existente en la memoria a largo plazo. Este tipo de carga cognitiva aumenta cuando se dificulta la creación de conexiones efectivas entre conceptos de la disciplina.

A este respecto, se deben priorizar aquellos vídeos que vinculen los contenidos explicados con conceptos previos de la misma disciplina, facilitando la contextualización del nuevo conocimiento y fomentando, así, el procesamiento generativo. Además, será un aspecto positivo la existencia de series de vídeos que puedan reproducirse de manera secuencial y escalen en nivel, permitiendo de esta manera un aprendizaje gradual e interconectado.

Sígueme la Corriente

Utilizamos todas estas conclusiones para crear una nueva sección de vídeos en el canal de YouTube analizado, “Sígueme la Corriente”. Este contenido, ahora sí, fue creado específicamente para ser utilizado en la educación formal. Tuvimos en cuenta que hubiera un buen apoyo visual de las explicaciones habladas, que la calidad de audio e imagen fuera buena, que la duración del vídeo fuera la óptima, adecuamos el ritmo de las explicaciones y el estilo comunicativo, e hicimos especial hincapié en la conexión de los conceptos explicados con los fundamentos teóricos de la disciplina.

El resultado se plasmó en varias series de vídeos educativos que fueron integrados en el aula con resultados muy positivos. Su uso favoreció el aprendizaje conceptual en áreas complejas y abstractas, y contribuyó al rendimiento académico y la motivación de los alumnos.

Divulgación y educación: un camino bidireccional

Tener en cuenta todos estos factores puede beneficiar tanto a docentes como a creadores de contenido. Por un lado, los creadores de contenido pueden hacer uso de estas indicaciones para dirigir parte de sus vídeos divulgativos a un formato adecuado para su inserción en el aula. Así, mientras mantienen su finalidad divulgativa, conseguirán añadir una nueva dimensión a su canal que favorecerá su uso y popularidad.

Por otro lado, la consideración de los factores anteriores garantizará la selección del vídeo más adecuado para fines didácticos. Serán vídeos optimizados para reducir la carga cognitiva de las explicaciones. Vídeos que serán, para el profesorado, su mejor aliado en el aula.

Rubén Lijó Sánchez, Investigador Predoctoral, Universidad de La Laguna; Eduardo Gregorio Quevedo Gutiérrez, Profesor en el Área de Didáctica de la Matemática, Departamento de Matemáticas, Universidad de Las Palmas de Gran Canaria y José Juan Castro Sánchez, Profesor de psicología, Universidad de Las Palmas de Gran Canaria

Este artículo fue publicado originalmente en The Conversation. Lea el original.