Los semáforos se erigen como guardianes silenciosos de la seguridad vial. Su función no es meramente regular el flujo de vehículos y peatones, sino también salvaguardar vidas. Sin embargo, a menudo, esta señalización es pasada por alto, ignorada o desafiada, lo que pone en peligro la integridad de todos los que comparten las vías.
Este año, el foco de la campaña de seguridad vial Yo Respeto son los semáforos. Se trata de una iniciativa del Diario Río Negro que cuenta con el apoyo de la Municipalidad de Neuquén.
Cada año, miles de personas sufren lesiones graves o pierden la vida en accidentes de tráfico evitables. Muchos de estos incidentes podrían haberse prevenido simplemente obedeciendo las señales de tránsito, incluidos los semáforos.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el costo que representa para los contribuyentes la siniestralidad vial es un 3% del Producto Bruto Interno de cada país. En Argentina, en el año 2019, el costo social fue de $354.086.473.992 (al precio corriente de ese año) y representó el 1,6% del PBI.
Silvia González, presidenta de laFundación Estrellas Amarillas, explica que esto se debe a la salud de la siniestralidad vial. «Son miles y miles de víctimas en el país todos los años. En el caso de las motos, por ejemplo, muchas víctimas necesitan una válvula intercraneal importada que tiene un alto costo en dólares para frenar el traumatismo craneano y evitar que el cerebro colapse, algo muy habitual por la falta del uso del casco».
Por otro lado, de acuerdo con un ranking publicado el año pasado en Compare the Market, un sitio web de aseguradoras del Reino Unido, Argentina es el sexto país con los peores conductores del mundo. La clasificación se realizó teniendo en cuenta el marco legislativo y de infraestructuras de manejo en cada país.
A esta información la presidenta de la Fundación Estrellas Amarillas agrega que el «70% de las víctimas son hombres, y de los siniestros más violentos la gran mayoría son ocasionados por conductores masculinos.»
«70% de las víctimas son hombres y de los siniestros más violentos la gran mayoría son ocasionados por conductores masculinos.»
Silvia González, presidenta de la Fundación Estrellas Amarillas
El respeto a los semáforos fomenta una cultura vial de civismo y cooperación. Cuando todos los conductores y peatones cumplen con estas normas básicas se crea un entorno más seguro y ordenado en nuestras calles. El caos y la imprudencia ceden paso a la armonía y el respeto mutuo, promoviendo una convivencia más amable y pacífica en los espacios urbanos.
El objetivo principal de la campaña Yo Respeto 2024 es instar a todos los ciudadanos a reflexionar sobre la importancia de respetar los semáforos. No se trata solo de cumplir una norma legal, sino de proteger nuestras vidas y las de quienes nos rodean.
Es un pequeño gesto que puede marcar una gran diferencia en la seguridad vial de nuestra comunidad. Respetemos los semáforos por obligación y por el bienestar de todos.
Este contenido fue originalmente publicado en RÍO NEGRO y se republica como parte del programa «Periodismo Humano», una alianza por el periodismo de calidad entre RÍO NEGRO y RED/ACCIÓN.