El Festival de Cannes es uno de los eventos culturales más importantes del mundo y su alfombra roja es el lugar donde los grandes diseñadores de moda muestran sus creaciones. Las celebridades desfilan y posan para la foto, y los medios analizan, avalan y critican sus looks. Pero, además, este momento suele ser también una gran oportunidad para dar un mensaje.
La actriz Cate Blanchett lo entendió así este año y, luego de prestarse al juego de vestirse y posar, decidió sacarse los zapatos. En la alfombra roja, lució prendas de Louis Vuitton y también un mono de terciopelo de Giorgio Armani. Pero, en el momento en que tuvo que entregar el premio a la artista revelación Zahra Amir Ebrahimi, se presentó en el escenario descalza.
Años anteriores, otras actrices hicieron lo mismo para señalar el sexismo en la industria cinematográfica. En 2018, Kristen Stewart se quitó sus zapatos Christian Louboutin a mitad de la alfombra roja y explicó sus motivos de manera contundente: “Si no les estás pidiendo a los chicos que usen tacones y vestido, tampoco me lo pidas a mí”. En 2016, fue Julia Roberts la que posó descalza como protesta, un año después de que el festival impidiera que dos mujeres ingresen a la proyección de una película por usar zapatos bajos.
En definitiva, a las mujeres nos enseñaron a usar zapatos altos para “vernos más lindas”, “más estilizadas” o “más femeninas”, y durante mucho tiempo lo hicimos creyendo que esto era lo suficientemente importante como para soportar la incomodidad y el dolor que generan. Un lugar como la alfombra roja de Cannes, que marca tendencias de moda alrededor del mundo y pautas sobre “qué hay que usar” para verse bien, es el espacio perfecto para que las celebridades femeninas den un mensaje diferente.
En esta ocasión, Cate Blanchett decidió ir más allá y su mensaje estuvo enfocado en la defensa de los derechos de las mujeres. La actriz a la que le entregó el premio revelación, Zahra Amir Ebrahimi, huyó de Irán a sus 20 años después de que se filtrara un video íntimo de ella y de que la acusaran en la justicia por haber mantenido relaciones sexuales antes del matrimonio. Si no hubiese podido huir, tendría que haber enfrentado una condena que incluía años de prisión y latigazos. Antes de entregar el premio, Blanchett anunció: “Me voy a quitar los tacones en honor a las mujeres de Irán. Para apuñalar (en referencia a usar el calzado como arma) a todos los que se interponen en el camino de los derechos de las mujeres”.
Hace tiempo que Blanchett se pronuncia por los derechos de las mujeres y realiza acciones para cambiar la industria desde adentro. En su productora Dirty Films, se encarga de que la mayor parte del equipo esté integrado por chicas, una decisión que tomó tras años de trabajar en una industria donde la mayoría siempre fueron hombres. En una charla que tuvo con Coco Francini, la actriz explicó que hasta hace no mucho tiempo solía sentirse alienada y molesta en el set y se dio cuenta que tenía que ver con esto: tenía grupos de trabajo de 63 personas, donde 62 eran hombres y ella la única mujer.
