¿Sentís que las cosas duran cada vez menos? Bueno esa sensación está respalsada por la evidencia. La obsolescencia programada (arbitrariamente definir una fecha de caducidad de un producto), la obsolescencia indirecta (no encontrar repuestos o herramientas para la reparación); o la obsolescencia psicológica (las modas) nos empujan a consumir y descartar a un ritmo acelerado. Un ritmo que nuestro planeta, con recursos finitos, no puede sostener.
Posiblemente oíste hablar sobre las tres R que tenemos que llevar a la práctica para tener consumos responsables: reducir, reutilizar y reciclar. Pero, hay otras R aliadas, como rediseñar, rechazar, repensar. Y la que busca combatir la cultura del descarte: reparar.
Así lo entiende el Club de Reparadores, un movimiento que impulsa la reparación de objetos. Aunque el movimiento cuenta con distintas aristas, la más emblemática son los encuentros itinerantes en los cuales se juntan personas con objetos rotos, como prendas de vestir o electrodomésticos, y otras que saben repararlo, brindan su servicio gratis a la vez que comparten saberes.
Como te contaba Daniela Carrizo en esta nota, “los eventos son ‘de código abierto’”, es decir que cada comunidad puede organizar su propio evento con base en la experiencia que transmiten desde el Club de Reparadores. Hoy, a través del programa Club de Reparadores x América Latina, se están conformando 20 nuevos grupos en la región.
Desde que nació en 2015, el movimiento impulsó más de 90 encuentros en puntos distintos como Buenos Aires, Río Negro, Córdoba y Montevideo. Se repararon aproximadamente 7.000 objetos, con una tasa de reparabilidad del 65 % (como contábamos en la nota, no todos los objetos pueden repararse).
Además de promocionar la cultura del cuidado a través de encuentros comunitarios, un programa para escuelas y acciones con empresas o gobiernos, el Club de Reparadores también busca fortalecer el empleo. Por eso, crearon Reparar.org, un directorio de servicios de reparación. A su vez, antes de cada evento, las personas que lo organizan relevan reparadores barriales, los invitan a participar y promocionar sus servicios para promover el trabajo local de reparadores de oficio y de comercios que venden herramientas e insumos.
Por otra parte, los eventos comunitarios de reparación refuerzan los lazos humanos. “La iniciativa se trata no solo de reparar cosas, sino también de reparar vínculos. Nos ofrece una oportunidad de compartir tiempo y herramientas a cambio de nada. Una persona va porque se le rompió una radio y otra le enseña a repararla por el simple gusto del oficio, o al menos lo intenta. Se aprende, se enseña, se involucra”, contaba Virginia Martínez, parte del Club de Reparadores en Córdoba.
¿Cómo podemos hacer crecer esta red? Acá te dejamos algunas maneras:
-Ayudá a hacer crecer reparar.org, el directorio de servicios de reparación que creó el Club de Reparadores. Quienes reparan pueden anotarse gratis. ¿Qué pensás de decirle al zapatero de tu barrio o a aquel vecino que arregla electrodomésticos que se anote? Entre todos se puede hacer que este sea un sitio de referencia para reparar.
- Registrarte como voluntario del Club de Reparadores. Sea que sepas reparar cosas o que quieras apoyar con tareas logísticas en los eventos, completá este formulario para que te sumen a la base de datos y te contacten cuando se acerquen jornadas de reparación.
- Postulate para organizar uno de los encuentros. En abril cerró una convocatoria para capacitar sobre cómo realizar estos eventos, pero podés completar este formulario y quedar en la base de datos para futuras convocatorias.
- Si sos parte de una empresa, contactá al Club de Reparadores para charlas y talleres en los que se promueve la reparación y el consumo responsable en ámbitos corporativos.
-Si integrás una comunidad educativa, acerca a tu escuela Ligas menores, una serie de videos y recursos educativos para jóvenes activistas que pueden usarse en colegios secundarios.
-También podés hacer una donación online para ayudar a sostener esta actividad.
CONTACTÁ AL CLUB DE REPARADORES
La campaña del mes cuenta con el apoyo de la Solutions Journalism Network (la Red Mundial de Periodismo de Soluciones) y del Gobierno de Neuquén.