Tenemos un acento, hablamos un dialecto
Muchas personas creen que hay solo una forma correcta de hablar un idioma, generalmente la que coincide con la norma social dominante. En el caso del español, se asocia con el habla de Castilla, vista como prestigiosa y correcta. Sin embargo, la ciencia lingüística actual no considera inferiores a los dialectos, sino como variedades legítimas del idioma. Los acentos y dialectos se adquieren naturalmente, especialmente en los primeros años de vida, y pueden cambiar debido a la convergencia fonética al adaptarse a nuevos entornos.