¡Buenos días! Esta es una edición que preparamos para reflexionar sobre las personas refugiadas, en vísperas del 20 de junio, Día Mundial del Refugiado.
Pero antes de meternos en ese tema, queremos pedirte tu colaboración para difundir la búsqueda de Loan, el niño correntino de cinco años que está perdido desde el último jueves.
Compartí esta newsletter o suscribite
1
Loan se perdió el jueves en Paraje Algarrobal, una zona rural a 175 kilómetros de la ciudad de Corrientes. Tiene aproximadamente 90 centímetros, tez trigueña, cabello negro. También una cicatriz en la cabeza, en el lugar del remolino.
Si podés aportar información, llamá al 134. También podés ayudar difundiendo su imagen.
2
Refugiados. La condición de refugiado es aquella en la que una persona tuvo que dejar su tierra por una seria amenaza, generalmente ligada a motivos religiosos, políticos. Era una necesidad, una urgencia salir de su país para ponerse a salvo.
Es una condición distinta a la del migrante, que es alguien que salió de su país sea por la circunstancia que fuere (por ejemplo, motivos familiares o económicos). El refugiado es un migrante que está amenazado en su lugar de origen.
El número de refugiados en el mundo crece cada vez más dela mano de los conflictos, que se multiplican en todo el planeta. Como las guerras civiles, las grandes guerras entre naciones. A diferencia de cualquier otro migrante, la vida del refugiado está en juego.
Por otro lado, el refugiado siempre está en una situación legal. Si bien cualquier persona debería ser considerada legal, suele ocurrir que muchos migrantes no tienen sus papeles en orden, lo que le trae muchos problemas laborales, personales o de atención sanitaria.
Pareciera que en esto está favorecido el refugiado, porque puede transitar el país donde esta con los mismos derechos que cualquier ciudadano: puede ser empleado, recibir atención médica, hacer múltiples trámites.
Pero la situación de un refugiado viene de sufrir un verdadero terror. Su vida y la de sus seres queridos fue amenazada. Es una situación terrible. Y ahora, de pronto, tiene la posibilidad de vivir una vida, si cabe la palabra “normal”, igual que sus nuevos coterráneos.
De todos modos, migrar, por cualquier motivo, implica abandonar su lugar, sus afectos, sus cosas. Muchas veces en su nuevo lugar les hacen sentir su condición de extranjero. Es una situación dura.
3
Todo esto nos lleva a pensar si la Tierra no debería volverse un hogar para todos. Si no debería borrar sus fronteras. Sin caer en el desorden, sin eliminar el Estado y las instituciones de cada lugar. Pero en esta emergencia humanitaria, evidentemente, a pesar de la globalización de la economía, el comercio y la cultura, todavía nos queda algo lejos la globalización de la solidaridad.
Antes que pensar en el status de refugiado, pensamos en la persona que debe dejar su tierra. Que sea como sea es una tragedia personal. En la Argentina hemos vivido muchas olas de inmigrantes. La última fue la de venezolanos, quienes, si bien la mayoría no vive en la condición legal de refugiados, fue muchas veces una salida impulsada por una crisis en su país.
Pan American Energy busca ser un promotor activo en el desarrollo de las comunidades en las que opera. Por ello, lleva a cabo acciones de triple impacto para crear valor económico, social y ambiental a través de la articulación público-privada. Su trabajo en Sustentabilidad se basa en cuatro ejes estratégicos: educación y cultura, salud y deporte, desarrollo local y ambiente. En el último año, con sus más de 100 programas, la compañía alcanzó a más de 300.000 personas.
Conocé más en pan-energy.com/sustentabilidad
4
Una charla rápida con Eman y Zeban, dos refugiados que llegaron a la Argentina desde Siria. Escaparon de la guerra en Alepo y se instalaron en Tandil (provincia de Buenos Aires), donde cuentan con un taller de ropa (hace tres años contamos su historia en esta nota).
—¿Qué es lo más difícil de ser refugiado?
—Lo más difícil de ser refugiado es perder tu lugar, familia, amigos, idioma y cultura.
—¿Qué es lo que más extrañan de su país?
—Juntarnos con nuestras familias, la comida y hacer chistes en árabe y que los entienden todos.
—¿Qué fue lo más difícil del proceso de adaptación?
—Encontramos en la Argentina, todo nuevo, pero todo lindo. Lo más difícil para adaptarse es el idioma, porque no te podés comunicar con la gente. Nos costo mucho, ya llevamos seis años acá y estamos aprendiendo todo los días gracias a la gente y amigos.
—¿Qué cosas les facilitaron la adaptación?
—Cómo vinimos por la iglesia Peniel, estuvimos rodeados con mucha gente, y cada vez que precisamos algo siempre estaban a nuestro lado y siguen ayudando en cualquier cosa que nos cuesta.
—¿En qué momento comenzaron a considerarse “argentinos”?
—Cuando tuvimos la ciudadanía argentina, hace dos años.
—¿Qué sugerencias harías para las personas de una ciudad en pos de incluir a personas refugiadas?
¿Qué hacer y qué no hacer?
—Mi sugerencia es que tienen que acompañar los refugiados porque ellos van a tener mucho miedo y preocupación por todas las cosas nuevas que van a encontrar, idioma, educación y trabajo.
—¿Creen que hay solidaridad para recibir a quien escapó de su país porque su vida corría riesgo?
—Sí , la verdad las personas en la Argentina son muy amables y solidarias, ofrecen ayuda en todo. Esa también una de las cosas que nos facilitó adaptarnos acá. Gracias a la Argentina y su gente por abrir su puerta y sus brazos para recibirnos.
5
La de los refugiados y migrantes es una crisis global. Lo corroboran las estadísticas: según datos de mayo, 120 millones de personas se desplazaron de manera forzada (tanto dentro como fuera de su país).
“Detrás de estas crudas cifras, que se mantienen al alza, se esconden innumerables tragedias humanas. El sufrimiento debe impulsar a la comunidad internacional a actuar con urgencia para abordar las causas del desplazamiento forzado”, declaró Filippo Grandi, Alto Comisionado de la Naciones Unidas para los Refugiados.
En este contexto, la buena noticia es que países latinoamericanos como Brasil, Colombia, Perú y Ecuador implementaron programas de regularización para refugiados y migrantes. Y que varias naciones del continente son muy receptivas. Hay que avanzar en ese sentido, en la solidaridad global.
6
En línea con esto último, queremos recordar otra de las tantas publicaciones que hicimos en RED/ACCIÓN sobre las personas refugiadas. Se trata de una radiografía de nuestra comunidad para recibirlas. Porque la Argentina es uno de los países que más abren los brazos a quienes escapan del horror. En esta nota indagamos un poco por qué.
Cuidate mucho, cuidalas mucho, cuidalos mucho.
Te mandamos un gran abrazo.
Juan y David