El transporte aéreo, especialmente los viajes largos, es una de las peores cosas que una persona puede hacer por el clima. Para muchos, sin embargo, jurar no volar más no es una opción viable. Ahí es donde pueden entrar en juego las compensaciones de carbono. Pero, ¿cómo se compran y utilizan realmente estas compensaciones?
Las compensaciones de carbono "cancelan" las emisiones de un vuelo al compensar las emisiones de gases de efecto invernadero en otro lugar del mundo. El dinero que pagas para comprar compensaciones apoya los programas diseñados para reducir las emisiones. Esos pueden incluir proyectos para desarrollar energía renovable, capturar metano de rellenos sanitarios o ganado, o distribuir estufas de cocina más limpias.
Algunas aerolíneas te dan la opción de comprarlos a través de sus programas de sostenibilidad. Muchas empresas en línea y sin fines de lucro también las ofrecen.
Para asegurarte de que tu dinero se destine a proyectos valiosos, buscá certificaciones por parte de auditores externos rigurosos como Gold Standard o Green-e. Las compañías y organizaciones que se ocupan de las compensaciones de carbono enumerarán estas certificaciones en sus sitios web si las tienen. Algunos auditores también tienen bases de datos de proyectos verificados.
No hay un precio fijo para el carbono, y el costo de una compensación varía de un proyecto a otro, dependiendo de lo costoso que sea ejecutar un programa determinado, dice Sarah Leugers, directora de comunicaciones de Gold Standard. En general, sin embargo, las compensaciones de carbono probablemente cuestan menos de lo que uno cree.
Consideremos un viaje desde Nueva York a Los Ángeles. Volar 2.500 millas en clase económica quemará aproximadamente 0.29 toneladas métricas de carbono por pasajero, según la calculadora de emisiones de carbono de la Organización de Aviación Civil Internacional. Y costará alrededor de US$3.26 compensar el vuelo de aproximadamente seis horas de ida utilizando la calculadora de desplazamiento de viaje de Cool Effect, una organización sin fines de lucro. Si redondeas a una tonelada completa de carbono, solo gastarías entre US$3.30 y US$13.18 en el sitio web de Cool Effect, dependiendo del proyecto.
No todos los programas de compensación de emisiones de carbono son iguales, como se hizo evidente en una investigación reciente de proyectos forestales realizada por ProPublica. Para comprar de manera más inteligente, verificá cuánto dinero se destina a los gastos generales de la organización y no al proyecto que deseas respaldar.
© 2019 The New York Times