Una nueva isla emergió del mar frente a la costa de Iwo Jima, otra isla japonesa que forma parte del archipiélago Ogasawara en el océano Pacífico. El surgimiento de la nueva masa de tierra de 100 metros de diámetro se debe a una erupción volcánica submarina.
Setsuya Nakada, profesor emérito de vulcanología en la Universidad de Tokio, dijo al The Japan Times en esta nota que el magma estuvo en erupción bajo el agua alrededor de Iwo Jima, lo que se conoce como erupción freatomagmática, y fue solidificándose como roca bajo la superficie. La ceniza volcánica y las rocas se amontonaron en el lecho marino y luego se elevaron hasta 20 metros sobre el nivel de mar, según esta nota de DW.
Según explicó Yuji Usui, analista de la división volcánica de la Agencia Meteorológica de Japón a DW, la actividad volcánica disminuyó desde entonces y la isla recién formada se ha encogido un poco debido a que su formación "desmenuzable" es fácilmente arrastrada por las olas.
¿Por qué se generan estos terremotos?
Japón forma parte del Anillo o Cinturón de Fuego del Pacífico: una cadena tectónica de 40 mil kilómetros que se caracteriza por tener una gran actividad sísmica y volcánica. De acuerdo con este artículo de National Geographic, allí ocurre el 90 % de la actividad sísmica del planeta y concentra a la gran mayoría de los volcanes activos del mundo.
Además, el país asiático está atravesado por varias fallas geológicas como la Falla Itoigawa-Shizuoka y la Falla Media de Japón. Por ello, toda la actividad sísmica de la zona ha ocasionado el surgimiento de islas. De acuerdo con la Autoridad de Información Geoespacial japonesa, un total de 14.125 islas conforman el archipiélago de Japón.
Según esta nota de Wired, un ejemplo es la isla Nishinoshima, la cual durante diez mil años fue solo un pequeño islote. No obstante, entre 1974 y 2013 las erupciones volcánicas provocaron su expansión hasta alcanzar casi tres kilómetros de diámetro y su volcán se elevó 142 metros sobre el nivel de mar.