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¡Buenos días! Se viene el Día del Donante Voluntario de Sangre. Y queremos aprovechar la ocasión para recordar una hermosa campaña de Hospital Garrahan, que es un modelo a seguir en la materia.
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El Hospital Garrahan, que es una marca de altísima confiabilidad, admirado por todo el país, tiene un modelo único, que lleva ya varios años. De 65 a 70 personas donan sangre cada día, de lunes a domingo. Son individuos solidarios comprometidos son su prójimo, que va a donar en forma altruista sin saber a quién: donan para sostener al banco de sangre del hospital y no ante la urgencia por un familiar enfermo o un amigo que requiere una operación.
Es que, luego de tantas de estas situaciones angustiantes, alguien pensó: ¿qué pasaría si la provisión de sangre estuviera garantizada, así como lo están los insumos médicos? A fuerza de generar conciencia, el Garrahan es de los pocos lugares con la capacidad de autoabastecerse. Pero hay que pedir e insistir.
Y claro, para sostener este autoabastecimiento es necesario que los donantes asistan todo el año. Incluso en los meses de verano, cuando las vacaciones, los viajes y los cambios en la rutina hacen que la asistencia tienda a disminuir.
Por eso, ya desde hace algunos años el Garrahan lanzó su campaña “Abierto por vacaciones”. Cada fin de año insisten en un modelo que hace que la sangre espere a los pacientes, y no al revés.
Otra vez hablamos de la donación de sangre y con el riesgo de ser repetitivos. Pero como la salud humana requiere que lo hagamos y siempre hay pacientes y cirugías y tratamientos, por suerte buenos resultados, por suerte para la Argentina hay un modelo a seguir desde el orgullo, desde lo que significa ser un centro de salud admirable. Nuestro aplauso y la necesidad de acompañar desde hoy, hasta marzo abril, esta campaña maravillosa del Garrahan, este lugar mágico no cierra por vacaciones.
Pan American Energy busca ser un promotor activo en el desarrollo de las comunidades en las que opera. Por ello, lleva a cabo acciones de triple impacto para crear valor económico, social y ambiental a través de la articulación público-privada. Su trabajo en Sustentabilidad se basa en cuatro ejes estratégicos: educación y cultura, salud y deporte, desarrollo local y ambiente. En el último año, con sus más de 100 programas, la compañía alcanzó a más de 300.000 personas.
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“No hay que esperar a tener una emergencia. Se puede tomar como un compromiso de rutina: un par de veces al año ir a donar sangre. ¿Para quién? No importa. No sé para quién. Sé para qué: para ayudar a que alguien tenga vida”, contaba en una nota previa Roberto Peláez un docente de 51 años que acostumbra a donar sangre regularmente.
Historias como la suya son las que llevaron al Garrahan a contar con sangre siempre disponible. Un sistema que alivia a las familias que tienen a un familiar enfermo que necesita sangre para una transfusión u operación.
“Te llevás algo cuando sabés que aliviás a alguien que está pasando por un mal momento. Le saca una de sus preocupaciones de la cabeza. Todo lo que conlleva una enfermedad es más que suficiente como para tener que sumarle la angustia de que te falten donantes”, decía en la nota Lucía Kwist, otra donante voluntaria.
Para más detalles del modelo del Garrahan, te recomiendo la nota: “Cómo hizo el Hospital Garrahan para no tener nunca faltantes en su banco de sangre, ni siquiera en pandemia”.
Acá podés sacar turno para donar en el Garrahan o enterarte de más detalles sobre cómo funciona el Banco de Sangre de este hospital.
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Por otro lado, el “modelo Garrahan” se basa en buscar afuera del centro médico a los posibles donantes de sangre. Por eso adaptaron distintos ómnibus para visitar empresas, universidades y clubes para ir en buscar de dadores.
Más de la mitad de los donantes de sangre que colaboran con este banco aportan su sangre desde su lugar de trabajo o estudio.
A su vez, otra arista de la donación voluntaria y altruista es que ayuda a generar hábitos saludables en los donantes. Quien dona sangre recurrentemente tiene una motivación extra para cuidarse, y, al donar frecuentemente, se le hacen estudios periódicos para chequear su sangre.
Entre los donantes voluntarios, entonces, suelen encontrarse menos infecciones y patologías.
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Existen ciertos mitos sobre la donación de sangre que es necesario erradicar. Por ejemplo, que solo se puede donar una vez por año, que es doloroso o que es una práctica riesgosa, ya que podría conllevar a contagiarse de enfermedades.
Para tener información correcta sobre aspectos básicos del tema, te sugiero la nota: “Mitos y verdades sobre la donación de sangre”.
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Hablamos de la importancia de que en distintos lugares del país se replique un modelo como el del Hospital Garrahan: uno en el que todos los donantes vayan a dar sangre sin importarle a quién y en forma periódica, y no ante la urgencia por un conocido para quien hay que reponer.
Se trata de un cambio cultural profundo por el cual trabaja la asociación Dar por Más Sonrisas. Esta organización realiza talleres en escuelas, universidades, clubes, empresas y otras organizaciones civiles quieran promover la donación.
“Trabajamos durante varios meses con una misma comunidad, sumamos voluntarios, articulamos con otras organizaciones y buscamos atender las necesidades puntuales de cada lugar en diálogo con los centros locales de hemoterapia”, dice Andrea Colombo, fundadora de Dar por Más Sonrisas, sobre la manera en la que trabajan.
En nuestra nota de la campaña del mes (“Sumate a promover la donación de sangre y generar un cambio cultural que salva vidas”) te proponemos distintas maneras en las que podés contribuir a este cambio cultural.
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¿Donaste sangre alguna vez en forma anónima? ¿Lo hacés frecuentemente? Nos gustaría conocer tu experiencia. Contanos por mail.
Cuidate mucho, cuidalas mucho, cuidalos mucho.
Te mandamos un gran abrazo.
Juan y David
