Según un nuevo informe del Observatorio de Argentinos por la Educación, después de la pandemia hubo un incremento en la cantidad de alumnos que terminaron el secundario en los tiempos estipulados, aunque hubo un retroceso en la cantidad de estudiantes que lo hicieron con los aprendizajes esperados en Lengua y Matemáticas. El documento detalla que 13 de cada 100 estudiantes finalizaron estos estudios en 2022, en comparación a los 16 de cada 100 del 2020.
El informe titulado Índice de Resultados Escolares: ¿Cuántos estudiantes llegan al final de la secundaria en tiempo y forma?, cuya autoría corresponde a Irene Kit (Asociación Civil Educación para Todos), Martín Nistal y Leyre Sáenz Guillén (Observatorio de Argentinos por la Educación), analiza la trayectoria escolar de la cohorte que comenzó primer grado en 2011 y llegó al último año de la secundaria en 2022, utilizando los datos del Relevamiento Anual y las pruebas Aprender 2022 de secundaria.
“Tenemos una buena noticia ante nosotros: se va ampliando la cantidad de estudiantes que avanzan en su escolaridad y llegan hasta el último año de secundaria. Y un dato para preocuparnos: aún sin haber repetido o abandonado, son cada vez menos los estudiantes que dan evidencia de saberes matemáticos consolidados. Tenemos un logro para conservar y un déficit para revertir, tanto Lengua como Matemática caen, pero es mucho peor en matemática. Las pruebas PISA 2022 tuvieron como eje especial la enseñanza y aprendizaje de matemática. Es clave que estemos dispuestos a entender mejor qué pasa”, destacó Kit.
A nivel jurisdiccional, en 20 de las 24 jurisdicciones se evidencia un aumento progresivo y significativo en la proporción de estudiantes que completan la secundaria en el tiempo teórico esperado a medida que avanzan las cohortes.
Las tres provincias con mayor proporción de estudiantes que llegan al final de la secundaria dentro del tiempo teórico esperado son Tierra del Fuego (83 %), Río Negro (76 %) y Chubut (72 %). En el otro extremo se encuentran Corrientes (38 %), Misiones (45 %) y Santiago del Estero (45 %).
Marcelo Sebastián Velazquez, director ejecutivo de Fundación Más Voces, afirmó: “No podemos dejar de resaltar que la situación de pobreza en la que el país sigue estancado atraviesa todos los indicadores y problemas. El sistema educativo no está exento de ello aunque, paradójicamente, es la herramienta más importante que tenemos para poder salir de esta situación".
Magdalena Benvenuto, directora ejecutiva de la ONG Educar y Crecer, explicó acerca de los datos revelados por el informe que se traducen en una realidad alarmante: “A los 18 años, solo uno de cada 10 jóvenes en Argentina puede enfrentar el mundo de los estudios superiores. Esta tragedia no puede explicarse exclusivamente como un fracaso de la escuela secundaria o por factores coyunturales, como la pobreza, porque la tendencia negativa del desempeño de los estudiantes del secundario en Argentina ya arrastra 20 años. Es entonces necesario analizar al sistema educativo de raíz”.
Entre los estudiantes que llegan a tiempo al último año de la secundaria, solo el 21,5 % logra alcanzar los aprendizajes esperados de Lengua y Matemática, con niveles de desempeño satisfactorios o avanzados en Aprender 2022. Esto representa una caída de 12,6 puntos porcentuales en comparación con los resultados de 2019. Un 33,5 % de los estudiantes que rindieron la prueba en el último año no alcanza los niveles mínimos ni en Lengua ni en Matemática: la cifra aumentó con respecto al 26,5 % registrado en 2019. La caída se explica principalmente por el retroceso en los puntajes de Matemática.
El informe destaca que el efecto de arrastre que tiene el decrecimiento de la proporción de estudiantes con un dominio matemático que se ha mostrado en el informe, genera la necesidad de explorar con rigurosidad cuáles son las causas específicas de este deterioro. “El análisis de los ítems liberados de las pruebas muestra que algunos contenidos corresponden a años previos del recorrido escolar y pareciera no haber sido aprendidos en forma duradera. Adicionalmente, vale la pena indagar si el tipo de problemas aplicados en Aprender, se corresponde con los trabajos en clase habitualmente. En síntesis, resalta la importancia de concentrar los esfuerzos en una mejora significativa de la enseñanza de la matemática a lo largo de toda la educación obligatoria, ya que este déficit también es notorio en primaria. La próxima prueba PISA tendrá como área priorizada a la Matemática, por lo que los cuestionarios complementarios a estudiantes y docentes brindarán información relevante y útil, en la medida en que haya voluntad política y decisión técnica de interpretarlos y aplicarlos”, concluye el documento.
Viviana Postay, docente y referente de Argentinos por la Educación, cuestionó: “Si cada vez son menos los que aprenden Matemática, ¿cómo hallamos sentido a esa escolarización que se expande? ¿Qué valor real tienen las titulaciones de nivel secundario que estamos expidiendo? He ahí el verdadero interrogante de la democratización educativa a 40 años de recuperación de la democracia en Argentina”.