Tres herramientas que aprendí en “Stutz” que me ayudan a ser menos autoexigente (y a vivir mejor) - RED/ACCIÓN

Tres herramientas que aprendí en “Stutz” que me ayudan a ser menos autoexigente (y a vivir mejor)

 Una iniciativa de Dircoms + INFOMEDIA

¿Sentís que sos una persona autoexigente? Esta es una selección de los consejos que me ayudaron a mí, pero en “Stutz” se describen varios más. Después de leer la nota te recomiendo ver la película y elegir las que consideres útiles para acompañarte.

Tres herramientas que aprendí en “Stutz” que me ayudan a ser menos autoexigente (y a vivir mejor)

“Si me funcionó a mí, tal vez también funcione en otras personas”, introduce el actor hollywoodense Jonah Hill, director de ‘Stutz’ (2022). A través de su experiencia personal y las de su su terapeuta, el psiquiatra estadounidense Phil Stutz, la película enumera herramientas para afrontar problemas, atravesar duelos y aprender a vivir mejor hoy.

La terapia no sólo le ayudó con su depresión y ataques de ansiedad, sino que mejoró su vida “de forma inimaginable”, asegura el actor dos veces nominado al Oscar. Las “herramientas”, como las llama el psiquiatra, “pueden cambiar tu estado interior inmediatamente, en tiempo real. Toma una experiencia que suele ser desagradable y la transforma en una oportunidad”. “Es como un ejercicio de visualización en tiempo real que haces en tu mente”, agrega Hill.

El largometraje disponible en Netflix les llevó dos años de realización y pone en evidencia la vulnerabilidad, por ejemplo, ante la enfermedad de Parkinson que sufre Stutz. Además, cuentan las dificultades que ambos han tenido en sus relaciones familiares y románticas, así como sus duelos tras perder a sus hermanos, lo que “marca una fuerte conexión entre los dos”, describe un artículo en Rolling Stone.

La base de los consejos es el (auto)conocimiento de la Parte X de cada uno. Cuando los padres de Stutz le dijeron que su hermano había muerto, de pequeño, él resolvió rápidamente que volvería a la escuela y seguiría como si nada hubiera pasado, sólo quiso negarlo. “Cuando aparece la adversidad, es una oportunidad. En ese momento, enfrentas la Parte X directamente. Es tu parte sentenciosa, antisocial, es una fuerza invisible que no quiere que cambies ni crezcas, quiere bloquear tu evolución, quiere bloquear tu potencial, quiere joderte”, describe el terapeuta.

Por su parte, el actor explica que la Parte X es el villano en la historia de ser una persona. Sin embargo, las herramientas son lo que utiliza el héroe para vencerlo. Esta es la selección de las tres que me ayudan a ver las cosas desde otra perspectiva más autocompasiva:

1.Collar de perlas

El psiquiatra dibuja un collar de perlas con: una línea, un círculo, una línea, un círculo y así sucesivamente. Cada círculo significa una acción, pero lo importante es que cada una tiene el mismo valor: levantarte de la cama tiene el mismo valor que un fracaso que parece detenernos.

La verdadera confianza en uno mismo es aprender a vivir en la incertidumbre y seguir adelante, siempre avanzar. “El ganador no es el que toma las mejores decisiones o luce mejor. El ganador es el que sigue ese ciclo, el que se arriesga con cierto grado de fe, y luego enfrenta las consecuencias”, sintetiza Stutz.

Pero este no es un collar de perlas tradicional, en el centro de cada brillante hay un excremento, explica el terapeuta ante las risas de Hill. El punto acá es que, no importa cómo sea la acción, nunca será perfecta, lo importante es avanzar y poner la siguiente perla.

Collar de perlas

2.El reino de la ilusión

Esta herramienta sirve para ser conscientes cada vez que estamos buscando la experiencia perfecta, “sea lo que sea, no existe. Es sólo una imagen en tu mente”, asevera Stutz.

Esa perfección es como una imagen instantánea que no tiene movimiento, ni profundidad. Ante esto, es crucial recordar tres realidades que “todos tienen que vivir así, pase lo que pase”:

  • El dolor nunca desaparecerá
  • La incertidumbre nunca desaparecerá
  • No podemos huir de la necesidad de trabajo constante

3.Aceptación radical

Cuando algo nos sale mal, podemos decir ‘no es para tanto, mañana voy a estar mejor’. Pero Stutz propone pensar un poco más allá, sacarle el jugo, encontrarle el lado significativo. “Es intentar encontrar la manera de no entrar en la negatividad, entrenarte para decir: ‘¿qué voy a hacer al respecto ahora’?”.

Para incorporar la herramienta, aconseja:

  • No juzgarnos a nosotros mismos, lo que no significa que no haya nada negativo en la situación, sino que no vamos a ir por ese camino.
  • Encontrarle el lado positivo. Por ejemplo, debido al Parkinson Stutz debe realizar flexiones de brazos que le ayudan a no entumecerse, por lo que llega a hacer más de 100 al día y logró desarrollar una gran fuerza a pesar de la enfermedad.

El actor ejemplifica que usó esta herramienta la noche anterior cuando la ansiedad no le permitía dormir. En vez de sentirse peor por no poder descansar para el día siguiente de trabajo, dedicó ese tiempo para pensar más ideas para la filmación. Desde este punto de partida, “estás en una zona de enormes oportunidades”, arroja el psiquiatra.

Estas son solo tres de las herramientas que me ayudaron a mí a ser menos autoexigente y a no buscar la perfección, pero en la película se describen alrededor de seis más. Te recomiendo verla y elegir las que consideres útiles para acompañarte.