Primera edición de PLANETA de un nuevo año donde la acción climática no puede tomarse descanso. Por eso, anticipo los hechos que deberían marcar una diferencia para sumar a tu calendario.
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Nuevo año, nueva necesaria oportunidad para la acción climática. Después de varios años usando agenda, este 2021 me animé al bullet journal, una versión más personalizada para ordenar nuestras actividades según objetivos en el corto y largo plazo. Al diseñarlo, inevitablemente me puse a pensar qué podemos (o debemos) esperar en este nuevo año para que se acelere la acción climática en LA década clave.
Así que seleccioné cinco acontecimientos para seguir de cerca en nuestro "bullet journal climático" porque debieran marcar una diferencia en la necesaria y urgente acción ante el cambio climático.
- Recuperación ante la pandemia. Se sabe que la crisis por el coronavirus ha generado efectos negativos a nivel económico, especialmente en los países en desarrollo. Cómo los países decidan recuperarse económicamente será fundamental para acelerar la acción climática. ¿Por qué? Porque es la oportunidad para acelerar, por ejemplo, la transición hacia unas energías renovables que demostraron ser la fuente más resiliente ante la pandemia.
¿Cómo venimos? No muy bien. Según el último Climate Transparency Report, los países del G20 vienen tomando medidas en favor de actividades que impactan negativamente en el ambiente -como apoyar la industria de los combustibles fósiles-, en lugar de estimular los cambios drásticos necesarios.
- NDC, NDC, NDC. Has venido leyendo esta sigla a lo largo del 2020 y, ya te anticipo, la seguirás viendo aún con mayor repetición en el nuevo año. Se trata de las contribuciones determinadas a nivel nacional, es decir, los planes que elaboran los países con sus metas de reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEIs) y políticas de adaptación a los efectos del cambio climático.
En cumplimiento con el Acuerdo de París, los países tienen que presentar NDCs más ambiciosas cada cinco años. 2020 era el año de la segunda ronda de presentaciones, pero con la pandemia ello se vio algo retrasado al nuevo año. Algunos países han venido presentando sus nuevas NDCs, pero tendremos que continuar siguiendo de cerca las presentaciones restantes con vistas a que nos ubiquen en la senda del objetivo de limitar el calentamiento por debajo del 1,5°C.
- ¿Tendremos COP26? No tengo una respuesta certera aún, pero yo ya lo sumé en mi calendario del bullet journal. Las presentaciones de las mencionadas NDCs se realizarán rumbo a la COP26, la Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático, que tendrá el desafiante objetivo de retomar las negociaciones climáticas -suspendidas en 2020 por la pandemia- para avanzar en una efectiva y urgente implementación del Acuerdo de París.
Luego de posponerse un año por el coronavirus, está previsto que la COP26 se celebre del 1 al 12 de noviembre en Glasgow, Reino Unido. La última palabra para su realización la dará la evolución de la pandemia.
- El constante activismo. Para que todo lo anterior sea efectivo, el rol de la sociedad civil continuará siendo clave en el 2021. Sus acciones se vienen realizando de manera virtual o presencial, en función de los protocolos ante el coronavirus. Como siempre recomiendo, fundamental seguir a los representantes de tu ciudad y/o país para apoyar las causas de impacto local.
- La asunción de Biden. Es lo más próximo en el calendario. Joe Biden asumirá la presidencia de Estados Unidos en apenas unas semanas: el 20 de enero. Conforme expresó el presidente electo, ese mismo día iniciará el trámite para reincorporar al país al Acuerdo de París. A partir de ello, será clave cómo el país del norte asuma políticas concretas de acción climática. ¿La importancia de esto? Recordemos: Estados Unidos es el segundo país más emisor de GEIs.
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En tres preguntas: el escenario climático de América Latina para el nuevo año. Una de las regiones más ricas en biodiversidad, con mayor interés de públicos y privados para explotar sus recursos naturales, la más riesgosa para los defensores ambientales y una de las que más sufre los efectos del cambio climático.
Por todo conversé con Enrique Maurtua Konstantinidis, asesor senior sobre cambio climático de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN), para analizar las expectativas climáticas rumbo a este 2021.
- ¿Qué deberíamos esperar de América Latina en materia climática durante este nuevo año? Este año América Latina tiene que empezar a ponerle contenido a todo lo que han sido sus promesas climáticas. Cuando uno mira las nuevas actualizaciones de las NDCs o las nuevas NDCs que se presentaron en la cumbre de diciembre, muchas son mensajes políticos, números, objetivos generales. Pero eso debe estar acompañado de señales reales, es decir, debe ser respaldado al interior de los países. Esto es muy importante para poder darle mayor contenido y respaldo a los anuncios. En algunos casos, los anuncios fueron alentadores. La pregunta que la mayoría de las personas que trabajamos en estos temas en cada uno de estos países sigue siendo cómo se alcanzan esos objetivos. Sería muy necesario que durante el 2021 los países le den respaldo a esos anuncios.
- ¿Cuáles son los desafíos que se presentan para ello? El desafío principal va a seguir siendo la pandemia que estamos viviendo. En algunos casos porque va a seguir siendo utilizado de excusa para la no acción climática "porque hay otras prioridades, hay otras urgencias". Pero, como todos sabemos, la acción climática no es algo que pueda quedar para más adelante. La crisis climática va a ser más grave que el impacto que ha tenido la pandemia. Por lo que ésta no se puede utilizar de excusa, es más, ambas tienen que estar alineadas, no son excluyentes. La "desesperación" que genuinamente le puede agarrar a cualquier gobernante, que ve que los puntos de PBI caen abruptamente por los impactos económicos de la pandemia, puede llevarlos a querer resolver la situación con soluciones de corto plazo, contrarias a la acción climática. Pero la gente les está pidiendo acción ante el cambio climático.
- ¿Es posible una mayor integración de la región en materia climática? Lo veo como un desafío muy grande porque vivimos en una región que tiene mucha diversidad política e ideológica. Esto tiene su parte negativa: hay miradas muy distintas sobre el tipo de desarrollo económico que se elige y el tipo de mirada frente a la integración regional e internacional. Hay países más alineados con una postura de izquierda, otros que son más de derecha, y esas diferencias se notan. Por ello estará más difícil la añorada unión latinoamericana. Dicho esto, el punto en común siempre estará en la adaptación al cambio climático por su vulnerabilidad y el acceso a los medios de implementación (como financiamiento). Estos puntos sí unen a la región. Suelo decir que Latinoamérica es como "la clase media del mundo" y, justamente ante una ausencia de recursos, la región queda para después en cuanto a accesos a recursos financieros, tecnología y conocimiento. ¿Por qué? Porque hay otros países que son más pobres, más vulnerables, que presentan más desafíos. Es una realidad que se ve en los números, pero no es la excusa suficiente para que se libre de responsabilidad a los países desarrollados para que hagan ese aporte. En esto, Latinoamérica tiene una visión común de lo que necesita y debería recibir. Es un punto en común de posiciones, más que de integración.
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Hablando de cambio y crisis climática. Ante el reclamo del activismo por considerar a la crisis actual como tal, siempre sostuve que crisis climática no era un concepto que sustituya a cambio climático, sino que mientras éste último se refiere al problema, el anterior describe la situación actual en la que nos encontramos por ese problema. Bueno, ahora tengo una argumentación a esta postura que me gustaría compartirte.
La FundéuRAE recientemente aclaró las diferencias entre estos conceptos y, spoiler: no, cambio climático y crisis climática no son lo mismo. Conoce más aquí.
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En agenda: tres mujeres, tres entrevistas para leer. Suelo dedicar los fines de semana a leer artículos con mayor profundidad. En este último, me encontré con tres entrevistas de gran interés que tienen a tres mujeres, de distintas edades, países y ámbitos, como protagonistas. Les comparto un fragmento destacado de cada una de ellas.
- Greta Thunberg. "¡Debemos comenzar a tratar la crisis climática como una crisis y a tomar medidas para detenerla! Si no, solo seguiremos hablando de futuros objetivos, tan hipotéticos como distantes. Nada más que bonitas promesas que en realidad no significan nada porque en realidad no se cumplen. Por eso tenemos que realmente presionar a las personas en el poder para que hagan algo", reclamó la activista sueca en una conversación en La Nación.
- Saskia Sassen. "Los virus nos dijeron que estaban, y no les prestamos ninguna atención. Seguimos usando, habitando, agarrando, ocupando más tierras, lugares, espacios (...) No somos inocentes. No somos simplemente víctimas", recordó la socióloga neerlandesa en una entrevista en Perfil.
- Jane Goodall. "Necesitamos avanzar hacia una relación más sostenible con el mundo natural. Necesitamos una economía más verde. Si los países se alejan de los combustibles fósiles y subsidian la energía limpia y verde, se crearán muchos puestos de trabajo", expresó la conservacionista británica en una entrevista en The Guardian, en Inglés.
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Ser sustentables: y revalorizar los espacios verdes. Las medidas de confinamiento evidenciaron la necesidad de contar con buenos espacios verdes, en cantidad y calidad, en las ciudades. Su importancia no se limita al período de pandemia, pues tienen impacto positivo para el ambiente y nuestra salud. Florencia Tuchin quiere conocer cómo aprovechaste estos espacios verdes en tu localidad para profundizar en la temática. Podés compartirlo aquí.
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Hoy cierro con esta ilustración del gran Steve Cutts para expresar la intención de que se cuiden y cuiden a sus seres queridos. Hemos cambiado de calendario, pero aún seguimos en pandemia y crisis climática. Ambas requieren de nuestra responsabilidad individual y colectiva.
¡Hasta el próximo miércoles!
Tais
